Heraldo del Campo

fruticultura

Ciruelas del sol naciente para renovar el cultivo

El CITA va a analizar el comportamiento de nuevas variedades japonesas de esta fruta en Aragón para su posible implantación y el impulso de su producción.

Variedades de ciruelos japoneses cuya implantación en Aragón está estudiando el Centro de Innovación y Tecnología Agroalimentaria.
Variedades de ciruelos japoneses cuya implantación en Aragón está estudiando el Centro de Innovación y Tecnología Agroalimentaria.
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El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) coordinará un proyecto sobre la adaptación de las nuevas variedades de ciruelo japonés a las condiciones de Aragón. Los resultados de este proyecto tendrán aplicación directa en las principales zonas de cultivo de frutales en Aragón, principalmente en Valdejalón, Zaragoza, Bajo Aragón-Caspe y Bajo Cinca, con diferentes zonas dentro y fuera de la Red Natura 2000.

Javier Rodrigo, Sara Herrera y Brenda Guerrero, investigadores de la Unidad de Hortofruticultura del CITA, son los responsables de este proyecto y se encargarán de realizar el seguimiento técnico, realización de ensayos y análisis de resultados. "Con este proyecto pretendemos buscar alternativas a variedades de frutales que están muy extendidas, pero que son muy poco rentables en Aragón y que se han quedado obsoletas ya que en algunos casos datan de los años 70 y no se han renovado", explica Javier Rodrigo. Una de las posibilidades es el ciruelo japonés, que da un fruto mucho más grueso más redondeado y de diversos colores. "Además, podríamos prolongar el período de recolección de este fruto aumentando su rentabilidad», detalla Rodrigo.

Esta iniciativa, además, busca determinar la estructura varietal, es decir, si las nuevas variedades de ciruelo japonés pueden adaptarse con éxito a las condiciones de Aragón. Este objetivo se desglosa en tres líneas complementarias en el estudio de cada variedad como son: el análisis de la estructura varietal y evaluación de las necesidades de frío. De hecho, como apunta el investigador del CITA, "uno de los principales obstáculos es la diferencia de clima ya que las variedades que se van a testar se han obtenido en zonas climáticas muy diferentes, más cálidas, como Sudáfrica o California".

Asimismo, la determinación de auto (in) compatibilidad y alelos de incompatibilidad; y la caracterización fenológica (floración y maduración) y establecimiento de las necesidades de polinización son otros factores que se analizarán. "El problema es que los ciruelos necesitan variedades diferentes para polinizarse, por ello habrá que establecer las variedades que son incompatibles entre sí", señala.

Esta variedad de árbol puede alcanzar los diez metros de altura. Se caracteriza por sus brotes rojizos. Sus hojas son de márgenes aserrados y miden entre seis y doce centímetros de longitud, y de dos a dos centímetros y medio de altura. Sus flores aparecen en primavera y son de unos dos centímetros diámetro con cinco pétalos blanquecinos.

Hasta 2022

El grupo de cooperación está compuesto por investigadores del CITA, así como por Viveros Mariano Soria, la Asociación de Fruticultores de Caspe (Afruccas), Plantaciones Algairén (como beneficiarios) y Agrostock, la Escuela Universitaria Politécnica de La Almunia y Andrea María Cistelecan como socios del proyecto.

La superficie ocupada por el ciruelo alcanza las 1.000 hectáreas en Aragón, que producen más de 7.000 toneladas que se verían beneficiadas por la información generada por este proyecto. En España, el ciruelo es el segundo frutal de hueso en producción, por detrás del melocotón y nectarina.

Este proyecto, que se llevará a cabo desde este año hasta el 2022, cuenta con una subvención de 119.770 euros correspondiente la convocatoria de 2019 del Programa de Desarrollo Rural de Aragón 2014-2020, cofinanciado por el fondo Feader y el Gobierno de Aragón.

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