Manifestación de la 'españa vaciada'
Los partidos urgen al Gobierno central a involucrarse y exigen “partidas y acciones concretas”
Los asistentes instaron a los líderes políticos a impulsar “soluciones eficaces” y a mirar “de una vez” al medio rural.
Ministros, diputados nacionales y autonómicos, senadores, alcaldes y concejales se sumaron ayer en Madrid a la revuelta de la ‘España vaciada’. El Ejecutivo de Pedro Sánchez estuvo representado por hasta cuatro ministros. A la protesta asistieron la titular de Trabajo, Magdalena Valerio; la de Economía, Nadia Calviño; la de Industria, Reyes Maroto, y el de Agricultura, Luis Planas. También estuvieron el líder de Ciudadanos, Albert Rivera; el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, y la exministra de Agricultura Isabel García Tejerina, entre otros.
El propio Sánchez aseguró en Tarragona, donde participó en un acto de precampaña tras anular el programado en Zaragoza, que las reinvindicaciones que ayer se defendieron en Madrid eran "justas" y se comprometió a "llenar de oportunidades" la España interior. Sus palabras coincidieron con las de su ministro de Agricultura, Luis Planas, que apostó por favorecer el relevo generacional, reducir la brecha digital en el medio rural y fomentar un regadío "eficiente y sostenible".
Por su parte, el líder del PP, Pablo Casado, prometió en León mejoras en fiscalidad, servicios básicos y tecnología para que los "pueblos no se cierren". Los populares también cargaron contra la "falta de ambición" del PSOE de Pedro Sánchez. "Es el PP el que defiende los regadíos, las diputaciones y una ley electoral que no deje sin voz a las provincias más despobladas como pretenden otros partidos", aseguró la exministra Tejerina minutos antes de la manifestación.
También en clave electoral, Rivera –el único líder nacional que asistió a la protesta–, adelantó que planteará un pacto de Estado contra la despoblación a todos los partidos políticos. "Ya basta de palabras. La gente debe poder volver a los pueblos y quedarse en ellos", afirmó el presidente de la formación naranja, que planteó una rebaja fiscal del 60% y una tarifa plana de 30 euros para favorecer el empleo femenino en el medio rural tras ser recibido con algunos abucheos.
El secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, prefirió que fueran los movimientos sociales quienes hablasen. "El protagonismo hoy no debe ser de los partidos, debe ser de la gente que ha venido", aseveró.
Los partidos permanecieron en un segundo plano por decisión expresa de la organización, que prohibió cualquier símbolo político. Fueron interpelados, no obstante, durante la lectura del manifiesto. Las decenas de miles de personas que se congregaron en la plaza de Neptuno emplazaron a los grupos "y a cada uno de los candidatos", estuvieran o no presentes, a "mirar de una vez por todas hacia el medio rural" y a ofrecer "soluciones eficaces para luchar contra el desequilibrio territorial de España".
La delegación aragonesa
Los siete grupos de las Cortes de Aragón estuvieron ampliamente representados en la protesta de la ‘España vaciada’. Al presidente del PP-Aragón, Luis María Beamonte, se sumaron el hasta ahora diputado nacional Manuel Blasco; la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, y el presidente del PP turolense, Joaquín Juste, entre otros.
"Este grito colectivo va más allá de Aragón. Requiere de un pacto de Estado y de compromisos por parte de la Comunidad Autónoma", subrayó Beamonte. La prioridad, a su juicio, ha de ser "tratar de revertir la situación tras años hablando de planes y estudios". "Nuestro objetivo es conseguir que la brecha entre las grandes ciudades y el medio rural se estreche cada vez más. Esto será posible con políticas que garanticen el Estado de bienestar en materia de sanidad, educación, infraestructuras, fiscalidad y apoyo al emprendimiento", añadió.
A la manifestación no asistió el presidente de Aragón, Javier Lambán, que incidió a través de sus redes sociales en que sin una nueva Política Agrícola Común (PAC) y una nueva financiación autonómica "no hay nada que hacer". Por parte del PSOE-Aragón estuvieron su secretario de Organización, Darío Villagrasa; la diputada nacional Susana Sumelzo, la secretaria general del PSOE-Teruel y consejera de Educación, Mayte Pérez; el presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Miguel Gracia; el consejero Vicente Guillén; los diputados autonómicos Pilimar Zamora y Herminio Sancho y el alcalde de Huesca, Luis Felipe, entre otros.
Para Villagrasa, "es necesaria y urgente la involucración del Gobierno de España, no solo con acciones y políticas concretas, sino con presupuesto". "Queremos que cualquier persona, nazca donde nazca, tenga las mismas oportunidades para prosperar, ya sea en un pueblo o en las grandes capitales", expuso.
El secretario general de Podemos-Aragón, Nacho Escartín; el diputado Andoni Corrales y la portavoz y candidata al Pignatelli Maru Díaz también exigieron "políticas de Estado" que permitan repoblar la ‘España vaciada’. "Tenemos herramientas aprobadas como la ley 45/2007 de Desarrollo del Medio Rural, solo se necesita un Gobierno valiente que las ponga en marcha y les dé financiación. Si hay un problema de cohesión y de equilibrio territorial es entre la España llena y la vaciada", aseguró esta última.
Trabajar "desde la unidad"
Para el presidente del PAR, Arturo Aliaga, que acudió a la manifestación junto al presidente de la Diputación Provincial de Teruel, Ramón Millán o la diputada autonómica Berta Zapater, entre otros, reivindicó "un futuro para Teruel". "Las administraciones, tanto la europea como el Gobierno de España y el de Aragón, deben tomar nota de este día histórico", dijo, al tiempo que se comprometió a seguir trabajando para resolver los "verdaderos problemas" del territorio.
Daniel Pérez Calvo, candidato de Ciudadanos al Gobierno de Aragón, incidió en la necesidad de "trabajar desde la unidad" y por encima de criterios partidistas. "Hay que evitar que haya comunidades de primera y de segunda", manifestó. Lo hizo junto al secretario de Organización de Cs Aragón, Ramiro Domínguez, a y los candidatos al Congreso por Zaragoza, Huesca y Teruel, Rodrigo Gómez, Lourdes Guillén y Joaquín Moreno, respectivamente.
CHA, con su presidente, José Luis Soro, a la cabeza, exigió que la despoblación esté "de verdad" en la agenda del Gobierno central y que la manifestación de ayer sea "un punto de inflexión". IU-Aragón, por su parte, recalcó que la despoblación "tiene responsables" y, en boca de su coordinador general, Álvaro Sanz, reivindicó una política agraria "que garantice precios dignos y evite la especulación".
