Los nervios por la incertidumbre sobre los elegidos para formar parte de las listas al Congreso y al Senado se han desatado en las filas del PP, cuya dirección autonómica guarda un absoluto mutismo sobre las designaciones. En lo que casi todos los dirigentes y cargos consultados coinciden es en situar al jacetano Mario Garcés, exsecretario de Estado de Servicios Sociales y actual responsable de Programas del PP nacional, como candidato al Congreso por Huesca. El relevo de Ana Alós es de las pocas decisiones que se dan por cerradas en Aragón, ya que debe afrontar el reto de recuperar la Alcaldía de la capital oscense, pese a que la política siempre ha defendido su intención de compatibilizar ambas candidaturas. «No se entendería que un mes fuera de candidata al Congreso y al siguiente, de alcaldable», señalaron varios dirigentes.

Garcés no solo fue uno de los apoyos del presidente nacional, Pablo Casado, en las primarias de Aragón, sino que es el aragonés con mayor responsabilidad en la dirección nacional.

También suena Manuel Giménez Larraz, hijo del presidente del PP-Aragón Manuel Giménez Abad asesinado por ETA, que podría dejar la empresa privada para dar el salto a la primera línea política. En su caso, distintos cargos señalan que podría encabezar las listas de Zaragoza o Huesca, aunque indicaron que sus preferencias apuntarían al Parlamento europeo. Lo que está claro es que está próximo a Casado, al que vino expresamente a ver el miércoles desde Madrid en el acto con afiliados que protagonizó a orillas del Ebro.

El exministro de Economía

Igualmente, está en boca de todos el fugaz exministro de Economía Román Escolano, fichado tres meses antes de la moción de censura a Mariano Rajoy, y que mantiene relación con el territorio por ser de Zaragoza. Igualmente, se comenta que podría ir por esta circunscripción como número uno.

No obstante, distintos responsables del partido señalan que, salvo sorpresa, tanto Eloy Suárez como Manuel Blasco repetirían como cabezas de lista por Zaragoza y Teruel. Y eso que el principal valedor de Casado en las primarias en la provincia turolense fue Alberto Herrero, también diputado nacional y cuyo escaño será más difícil revalidar como consecuencia de la irrupción de Vox.

Donde ir de número uno resulta crucial es en las listas al Senado, dado que el ascenso electoral del PSOE puede provocar que se inviertan los números con el PP, de modo que los conservadores solo queden con un representante por provincia y los socialistas con tres por el sistema de elección. Octavio López y Carmen Pobo se perfilan de nuevo como cabezas por Zaragoza y Teruel y está por ver si Antonio Romero vuelve a encabezar. Ningún aludido aseguró ayer estar al corriente de los designios del partido.