La constructora Acciona se enfrenta a una nueva causa judicial por otra de las grandes obras que asumió en la capital aragonesa durante la década pasada. En pleno proceso por la malversación millonaria en Plaza, en el que ha aceptado el pago de 60 millones como responsable civil subsidiaria, los propietarios y empresas instaladas en el Parque Tecnológico de Reciclado de Zaragoza (PTR) le reclamarán ahora por la vía civil otros 112 millones de euros por los graves defectos en la urbanización que hizo junto a Obrascón.

La asamblea de la entidad de conservación del PTR, de la que forma parte la DGA, acordó el 20 de diciembre emprender acciones legales contra la Unión Temporal de Empresas (UTE) tras constatar en dos extensos informes periciales "patologías y deficiencias muy graves" en la red de tuberías y en los viales, que se extienden a lo largo y ancho de 835 hectáreas en el citado polígono de reciclaje de La Cartuja.

La demanda, encomendada al bufete de abogados Arsuaga y Polo, se ampliará a la ingeniería que dirigió la obra, la consultora Intecsa-Inarsa, a la multinacional que hizo el movimiento de tierras en las instalaciones, Epsa, a la proveedora de las tuberías, Norditube, y a la promotora del polígono.

La ingeniería Compás Consultores, que ya se fichó en la Plataforma Logística de Zaragoza (Plaza?) para detallar daños similares en las tuberías de la zona comercial, achaca todo a una "deficiente ejecución" de la constructora y a la "falta de control de calidad" tanto de Acciona-Obrascón como de la dirección de la obra en el polígono zaragozano.

Y en este caso se hizo cargo la misma compañía que debía controlar las obras de Plaza que ahora están enjuiciadas a la espera de setencia. Los promotores del PTR, una sociedad en liquidación constituida por Industrias López Soriano, RYC, CAI y Cajalón, desembolsaron 164,5 millones por las obras, ejecutadas entre 2004 y 2008.

La realidad es que tuberías y viales, cuya titularidad es de la DGA al ser un proyecto supramunicipal, sufren graves daños que figuran en las inspecciones con cámaras, calicatas y sondeos realizados. Solo las redes de saneamiento y de aguas pluviales acumulan roturas y deformaciones en más de un millar de puntos.

La consultora lo achaca a múltiples fallos de ejecución: desde su instalación sobre ladrillos sin una cama de hormigón para su apoyo y anclaje hasta el "inadecuado relleno de las zanjas y una deficiente compactación". Ante su gravedad, se plantea su completa renovación, estimada en 30,3 millones.

Capítulo aparte son los asentamientos de los viales, que se han hundido en algún tramo hasta 85 centímetros. Los técnicos lo atribuyen a que no se tomaron precauciones para acometer los rellenos con materiales yesíferos, a pesar de que fueron "claramente indicados en el proyecto". Entre ellas, la adopción de franjas impermeables, la compactación por capas y la fragmentación de los bloques de yeso. En este caso, las actuaciones para corregir los daños y prevenir más hundimientos ascienden a 81,9 millones.

Antecedentes judiciales

Acciona, que declina hacer declaraciones, ya ganó hace cinco años un pleito similar a una de las empresas del PTR, Arcelor Mittal, que achacaba los problemas de asentamiento en su parcela a la rotura de las tuberías generales. Dos años después, Kalfrisa también reclamó daños y perjuicios, aunque en este caso se condenó a los arquitectos a pagar más de 400.000 euros y a Acciona, de forma solidaria, a sufragar los 3.000 euros de la reparación de un vierteaguas.