Pilar Ventura: "Espero llegar a acuerdos con los médicos para evitar una huelga"

¿Se imaginaba hace un año como consejera de Sanidad?

En absoluto. Aunque Sebastián Celaya decía que se iba a jubilar, reconozco que no me lo creí.

¿Debería haber continuado?

Sí, pero es su decisión personal. Hizo muchas cosas y muy bien. Cuando estaba todo muy avanzado, es cuando se retira.

Parece que los motivos que le llevaron a dejar la consejería son las tensiones con el Departamento de Hacienda e incluso entre ustedes.

No es cierto. Yo por mi formación y por el puesto que desempeñaba como secretaria general técnica me tocaba recordar en algunos casos las normas administrativas o presupuestarias, así como lo que los órganos de control no nos dejaban hacer. Un papel feo.

Entonces, ¿cuál cree que ha sido el motivo?

Creo que su principal motivo de cansancio fue que se encontró con una sanidad tremendamente deteriorada y un aparato administrativo y burocrático extremadamente lento y para él desconocido. Todos los consejeros de Hacienda tienen que repartir el presupuesto entre todos los consejeros. Es una tensión lógica en todos los gobiernos.

¿Es partidaria de que el consejero de Sanidad sea médico?

Por ese procedimiento para ser consejero de Agricultura habría que se agricultor, para ser de Universidad, universitario, para el de Carreteras, ingeniero de Obras Públicas… El consejero de Sanidad no toma decisiones asistenciales.

Tras otras dimisiones de su equipo y a medio año de las elecciones, ¿cómo se plantean los próximos meses?

Con continuidad. Los grandes proyectos de Sebastián Celaya, que formaban parte del programa de este Gobierno, ya están muy encarrilados. El plan de salud mental, el de crónicos, la renovación de la Atención Primaria, los hospitales de Huesca, Teruel y Alcañiz… No hay tiempo ni necesidad de hacer nada nuevo. Bastante trabajo hay con lo iniciado.

Va a tener que hacer frente a una amenaza de huelga de médicos y enfermeras, ¿le preocupa?

Esa es la parte negativa, la que me preocupa.

Reivindican mejoras laborales, pero sobre todo económicas, ¿va a poder ofrecérselas?

Espero llegar a acuerdos, por supuesto. Tenemos que negociar y ver con qué recursos contamos. Indudablemente no será lo mismo si hay presupuesto que si no lo hay. Las reivindicaciones económicas tendrían que reflejarse en un presupuesto. Hay que negociarlo. El tema de la reivindicación económica es la que me preocupa a mí y al Gobierno.

¿Estaría dispuesta a subir la retribución por hora de guardia?

Eso se ve en una negociación. No lo voy a negociar con ellos a través de HERALDO (sonríe).

Pero, ¿está abierta a hacerlo?

Abierta sí. De sus reivindicaciones no hay nada descartado. No obstante, creo que son conscientes de los alrededor de 32 millones de euros que nos va a costar la gracia de la jubilación forzosa de los médicos que hizo el Gobierno PP-PAR.

Aseguran que las listas de espera han mejorado respecto a la anterior legislatura, pero todavía hay 1.799 aragoneses esperando una intervención, ¿qué se puede hacer?

Se han hecho muchas cosas. La disminución que han tenido es un dato objetivo. Hemos llevado la transparencia a rajatabla. Hay una lista de espera estructural que no va a desaparecer. Las medidas van a ser las mismas que se han venido adoptando, que están dando bastante buen resultado.

La falta de médicos es un problema. Se han sacado muchas plazas, hay un plan de incentivos para cubrir las de difícil cobertura, pero no se puede obligar a la gente a cubrir determinados puestos.

Evidentemente. La cantidad de oferta pública que ha habido en el Servicio de Salud Aragonés es bastante superior a la que se ha hecho en otras comunidades y la situación tiene que mejorar. Pero puede darse el caso de que una persona haya aprobado oposiciones en dos comunidades y le guste más la plaza de allí.

¿Se está aplicando el plan de incentivos?

Sí, pero son todo medidas parciales. Ninguna es una solución, porque la única es que haya profesionales. Y hay escasez y un Aragón complicado. El 16% de los médicos de Familia tienen menos de 500 pacientes asignados, cuando la media nacional está en un 6%. Hay que conjugar una serie de medidas: que haya más oferta pública, que se les puntúe más por estar en un destino que en otro, que el interino tenga la garantía de poder hacer una mejora de empleo...

El Gobierno aprobó la posibilidad de que los médicos sigan trabajando hasta los 67 años, ¿sería partidaria de ampliarla hasta los 70?

Nos lo podríamos plantear. También es verdad que nuestro principal objetivo es que entren los jóvenes. Tenemos que buscar ese equilibrio. Llevamos 73 prolongaciones desde el acuerdo, que no son muchas.

Las Urgencias del Royo se saturan cada poco. La falta de camas en la margen izquierda de Zaragoza es un problema evidente. ¿Qué soluciones se plantean?

Ya hemos comenzado a derivar a pacientes del Royo a San Juan de Dios y estamos trabajando en buscar otro posible destino, que no está todavía decidido. Pero no tenemos nada cerrado.

¿No va a haber sorpresas con los hospitales de Teruel y Alcañiz?

Alcañiz lleva su marcha. El parte casi es semanal. No hay ningún motivo para pensar que no se va a cumplir el plazo de ejecución de 52 meses. El hospital de Teruel va perfectamente. Es el primer hospital en España que se hace por lotes con la nueva ley de contratos que es un trabajo ímprobo.