Las pernoctaciones turísticas caen un 21% en Aragón, el doble que la media nacional

La recuperación económica no acaba de llegar al sector turístico aragonés. Las pernoctaciones han caído más de un 21% en el mes de abril respecto al año pasado, el doble de la media nacional, y lo que es peor, la tendencia se mantiene casi invariables desde enero de 2017. Así lo revela el último boletín de coyuntura turística, publicado el pasado 31 de mayo por el Instituto Aragonés de Estadística (Iaest), que revela que los servicios de alojamiento siguen en números rojos pese a que los precios en la Comunidad se han reducido un 3%, más de triple que el promedio nacional.

Por su volumen, el descenso de los hoteles es el más importante, dado que registraron 426.699 pernoctaciones en abril, un 16,9% menos, duplicando con creces el porcentaje nacional. No obstante, el retroceso en la cifra de clientes es mucho más acuciado en los cámpines, de un 39,6%, y en las casas rurales, con un 32,5%.

Nadie se salvó, ya que los apartamentos turísticos también cayeron un 21,4% y los albergues, otro 16,2%. En total, se registraron 586.660 pernoctaciones en abril, lo que convierte la cuota aragonesa del sector turístico en residual: representa únicamente un 1,8%, aunque da empleo a 38.353 personas, un 1,2% más que hace un año. Fuentes oficiales de la Dirección General de Turismo han señalado que en la negativa evolución tiene mucho que ver el hecho de que este año cayera la Semana Santa entre marzo y abril y el año pasado, solo en el último mes.

El problema es que uno de los indicadores más importantes, el de la cifra de negocio e ingresos, también está muy por detrás del conjunto del país. Si la facturación media por habitación ocupada es inferior al promedio nacional, 53,7 euros frente a 80,6 euros, los ingresos medios por habitación disponible no llegan ni a la mitad: 23,8 euros en Aragón cuando en España alcanza los 51,5. De hecho, el retroceso en los ingresos fue el triple en abril solo teniendo en cuenta la prestación de alojamiento, al margen de otro tipo de servicios que prestan los establecimientos (restauración, spa, gimnasio y minibar, entre otros).

La situación es generalizada en Aragón, ya que no se libra ninguna provincia ni tampoco de las comarcas eminentemente receptoras de turistas tanto de Huesca como de Teruel, según los números del Iaest basados en la encuesta de ocupación hotelera.

Los datos son menos adversos si se observan el dato acumulado al mismo mes de abril. En este caso, el número de viajeros que optaron por dormir en un hotel llegó a 878.106 y solo se retrae un 0,3%, mientras que las pernoctaciones llegan a 1,7 millones y logran estar en número negros, con una recuperación del 1,6%.

El secretario general de la Federación de Empresarios de Hostelería de Zaragoza (Horeca), Jesús Boillos, ha señalado que no será un año de récord ni en Aragón ni en España, aunque ha considerado que cerrará como "un buen ejercicio". Boillos ha valorado positivamente la evolución de los hoteles de Zaragoza en lo que va de año, aunque ha reconocido que existe "capacidad de mejora" dado los actuales datos de ocupación.

El representante de Horeca ha incidido en la preferencia por la atracción de una clientela con mayor capacidad de gasto antes que por aumentar el volumen de ocupación. "Trabajar en en  ese segmento de público servirá para mantener la sostenibilidad", ha apostillado.