Un octogenario acusa a su sobrino de quitarle 198.000 euros y dejarlo en la ruina

El encausado reconoce que fue con el anciano al banco a sacar el dinero, pero niega que se apropiara de esta suma. El fiscal pide 5 años de prisión por apropiación indebida.

El juicio se celebró este miércoles, 21 de marzo, en la Audiencia Provincial de Zaragoza.
El juicio se celebró este miércoles, 21 de marzo, en la Audiencia Provincial de Zaragoza.
Heraldo.es

Los 198.000 euros que un octogenario logró ahorrar a lo largo de toda su vida no le van a permitir pagarse ni la residencia donde tuvo que ingresar tras sufrir una caída, ya que todo ese dinero desapareció hace unos años a la vez que el sobrino que hasta entonces se había encargado de cuidarlo. De hecho, el anciano asegura que la última vez que vio a esta persona fue el día que fueron juntos a sacar esta importante suma del banco. El sobrino, Miguel Ángel S. N., niega que se apoderara de los ahorros de su tío, pero la Fiscalía pide para él cinco años de prisión por un delito de apropiación indebida.

Durante el juicio celebrado este miércoles en la Audiencia Provincial de Zaragoza, el octogenario reconoció que como sus dos hijos viven en Sevilla, su sobrino se había convertido en su persona de confianza. Hasta el punto de que le había dado la llave de su casa y figuraba como autorizado en su cuenta bancaria. Pero aquella estrecha relación se quebró de la noche a la mañana. "Cuando salimos del banco, me llevó a casa con su coche y se marchó con el dinero", declaró el anciano ante el tribunal.

De que los 198.000 euros estaban en la cuenta del denunciante y de que este fue acompañado de su sobrino a sacarlos no existe ninguna duda, puesto que ambos así lo reconocen. El propio director de la sucursal confirmó ayer que se hicieron cuatro extracciones: dos de 70.000, una de 50.000 y otra de 8.000. La abogada que llevaba los asuntos contables al octogenario explicó que a este le iban a embargar la casa por el impago de una hipoteca de un hijo en la que figuraba como avalista y tenía miedo de que le quitaran también los ahorros. "Por eso quiso sacarlos del banco", indicó.

Según esta testigo, fue al cabo de un tiempo cuando el anciano le dijo que su sobrino se había llevado su dinero dejándolo en la ruina. "Parece que el acusado no se habla con sus padres desde hace años porque también les desapareció una cantidad incluso mayor", aseguró. Efectivamente, el padre de Miguel Ángel S. N. confirmó después que no mantiene ninguna relación con su hijo, pero no explicó los motivos.

El acusado insiste en que el dinero se quedó en casa del anciano y asegura que él nunca se llevó ni un euro a la suya. "Entre 2015, cuando se sacó el dinero, y 2017, cuando se denunció a mi cliente, por la casa de este señor pasó mucha gente. Cualquiera pudo llevárselos. Lo que está claro es que aquí nadie ha probado que este hombre se llevara nada", manifestó el abogado de la defensa, José Manuel Marraco, quien pide la absolución. La acusación particular, a cargo de María Ángeles Laguna, solicita una condena de 4 años y medio.

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