El fiscal jefe de la Audiencia Provincial de Zaragoza, Felipe Zazurca, deja claro antes que nada que, como representante del Ministerio Público, él tiene que cumplir la ley vigente. Dicho esto, apunta que "sería prudente" esperar a ver qué dice el Tribunal Constitucional antes de modificar la prisión permanente revisable.

"No es bueno legislar erráticamente a ritmo de la opinión pública y bajo la influencia de sucesos lamentables, como se hace a veces", dice, aunque también cree que el legislador "debe tener en cuenta el sentir general de la gente". "En cualquier caso –añade– parece claro que la prisión permanente revisable tiene carácter excepcional y muchas veces el apoyo de los ciudadanos sobre este asunto responde a una sensación de impunidad o de falta de rigor en el cumplimiento de las penas".

Por eso, el fiscal jefe apuesta por "mejorar" y "profundizar" en el control de la ejecución de las penas, ya que así se respondería a esa "lógica aspiración general" que existe en la sociedad.

"Si a alguien le imponen 25 años de prisión, a mí me parece una pena muy grave. Lo que pasa es que hay crímenes que denotan una especial maldad. Igual se requieren penas excepcionales para casos excepcionales", dice.

Mientras, para el fiscal Manuel Torralba la prisión permanente revisable es de "sentido común". "En este caso estoy con la mayoría de la sociedad española. Está claro que si lo fundamental es reinsertar, hay alguno que necesita más tiempo", afirma. "¿Qué vale más, el derecho individual o la aspiración de la ciudadanía a la seguridad?", pregunta. "Si es un individuo claramente peligroso, habrá que protegerse", responde. El fiscal echa en falta una medida "muy útil" que se usa en Menores, que es la libertad vigilada.