El Gobierno de Aragón ha recordado que es "fundamental leer bien el etiquetado de los disfraces y complementos adquiridos" en Carnaval, para evitar posibles peligros que pueden entrañar, como asfixias, estrangulamientos o inhalaciones de productos pequeños.

El Ejecutivo autonómico pretende con esta campaña de concienciación que se minimicen los posibles riesgos de inflamabilidad y tener una especial precaución con lazos, cuerdas y otros filamentos que puedan causar estrangulamientos.

La etiqueta debe incluir datos identificativos del responsable del producto, así como advertencias de seguridad, el marcado CE en su caso y la presencia de fragancias alérgenas permitidas cuando estás superan el 0.01 por ciento del peso o componentes.

El Gobierno de Aragón ha recordado, además, que el cuidado debe ser aún mayor si se trata de menores de siete años o de niños con una estatura inferior a 1,34 metros, ya que está prohibido que el disfraz lleve cuerdas ajustables o cordones en la zona de la cabeza, cuello o parte superior del pecho.

En este sentido, Consumo también aconseja prestar especial atención a los botones y elementos de menor tamaño que los niños puedan extraer e ingerir o inhalar. Además, algunas máscaras o caretas tienen orificios de ventilación diminutos que pueden dificultar la respiración de quienes las portan.

Por último, han hecho hincapié en la necesidad de conservar el ticket o justificante de compra para poder formalizar una reclamación. Para ello, hay que dirigirse al Servicio de Atención al Cliente de la empresa en primer lugar, que estará obligada a dar respuesta en el plazo máximo de un mes.

Si el usuario no recibe respuesta en dicho plazo o si esta no es de su agrado, se puede elevar la queja ante los Servicios Provinciales de Ciudadanía y Derechos Sociales o ante las Oficinas Municipales y Comarcales de Información al Consumidor. Asimismo, se puede establecer contacto con la Dirección General a través de consumo.doc@aragon.es o desde el 900 12 13 14.

En 2017, se notificaron en la red de alerta nacional y europea, un total de 98 productos relacionados con artículos de broma, disfraces y complementos que podían causar distintos daños. Entre ellos se encontraban 42 disfraces; 14 barbas, pelucas y bigotes; 18 máscaras; y 24 complementos varios.

Asimismo, la Dirección General de Protección a Consumidores y Usuarios realizó el pasado año 2.330 actuaciones en relación a estos productos, de los que localizó únicamente 15 referencias de las señaladas e intervino un total de 97 unidades.