Consejos para estudiar y aprobar los exámenes de febrero

Consejos para estudiar y aprobar los exámenes de febrero

Expertos de Kühnel Escuela de Negocios han elaborado una selección de cinco consejos para ayudarte a superar las pruebas final de comienzo de año.

Organización, concentración, descanso, alimentación y confianza son claves para mejorar tu rendimiento.
Organización, concentración, descanso, alimentación y confianza son claves para mejorar tu rendimiento.
Pixabay

La Navidad ya es agua pasada y, con ella, se fueron los días de fiesta, regalos y excesos. La rutina ya ha vuelto a tomar poco a poco el control de nuestras vidas y, en el caso de los más jóvenes, comienzan también los agobios y los nervios propios de cada inicio de año.

Enero y febrero son sinónimos de exámenes y entregas de trabajos finales, por lo que miles de universitarios apuran los últimos días para tratar de, en muchos casos, recuperar el tiempo perdido y obtener unas buenas calificaciones.

A las puertas de una de las épocas más importantes para miles de estudiantes, expertos de Kühnel Escuela de Negocios han confeccionado una lista con cinco consejos que te acercarán a tu objetivo de aprobar los inminentes exámenes.

Organízate. Éxito y organización son ideas que generalmente suelen estar relacionadas. Planifícate, ten claro qué vas a hacer en cada momento, cuánto tiempo vas a dedicar a cada acción… Para lograrlo, puedes elaborar un calendario donde, con tan solo un vistazo, sepas qué te toca hacer cada día. Repartir las tareas en orden de prioridad es una cuestión básica. No dejes que el desorden y la pérdida de control se apoderen de ti en estos días. Concéntrate. No por estar más horas delante de los apuntes te los vas a saber mejor. Optimiza el tiempo que dediques al estudio. Para ello, es fundamental que permanezcas concentrado durante este tiempo. No importa la cantidad y sí la calidad del tiempo, es decir, que sea productivo. Los mejores momentos del día para concentrarte suelen ser la primera hora de la mañana y la primera de la tarde, aunque no todos los estudiantes son iguales. Descansa. Es igual o más importante que la concentración. No te apures por desconectar cada vez que consideres que tu cuerpo lo necesita. Favorecerá en muchos casos que relajes tu mente, después de varias horas de estudio, y te permitirá afrontar la siguiente fase del estudio en mejores condiciones. Tómatelo como un premio o una recompensa. Así tu motivación no decaerá durante el trabajo. No obstante, recuerda que es muy importante que no abuses de estas interrupciones, ya disfrutarás del tiempo libre una vez hayan finalizado los exámenes. Come bien. No descuides tu alimentación entre apunte y apunte. Tu cuerpo es sabio, y mejor trabajará cuanto mejor le cuides. Por ello, la mejor recomendación es que desayunes fuerte y abundante a primera hora, pues necesitas cargar energía para el intenso día que te espera. Intenta que no pasen largos espacios de tiempo sin ingerir ningún alimento y evita picar entre horas. Nuestro cerebro, uno de los motores principales para nuestro estudio, necesita estar despejado para trabajar a pleno rendimiento. Confía en ti. No dejes que los nervios se apoderen de ti y te hagan cometer algún error indeseado. Si has preparado bien el cuatrimestre, el último paso no debería ser un escollo difícil de salvar. No te dejes influir por los demás y cree siempre en tu trabajo y en tus posibilidades.