¿Hay relación entre los impuestos y las empresas catalanas que vienen a Aragón?

PP, PAR y C's instan a la DGA a revisar su política fiscal y los partidos de izquierda aseguran que no tiene nada que ver

El consejero de Hacienda y Administración Pública del Gobierno de Aragón, Fernando Gimeno, este jueves
Gimeno critica la falta de lealtad institucional de Santisteve con respecto al impuesto del ICA
Oliver Duch

PP, PAR y Ciudadanos instan al Gobierno de Aragón a revisar su política fiscal para combatir los efectos que la crisis independentista está teniendo ya en las empresas de la Comunidad.

Los populares interpelarán este viernes a la consejera de Economía, Marta Gastón, acerca de la "posible ralentización" que puede sufrir la economía aragonesa como consecuencia del proceso secesionista. En opinión de Ricardo Oliván, diputado del PP, el Ejecutivo tendría que introducir partidas para "compensar" estas afecciones. Cree, asimismo, que hay que "revisar la política fiscal" para que no persiga "fines recaudatorios" y haga de Aragón "una comunidad más competitiva".

El PP también preguntará al consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, sobre los efectos que tendrá la crisis catalana sobre el turismo aragonés.

Para el PAR, que este lunes presentó una iniciativa para conocer "cuáles van a ser las líneas generales que va a seguir el Gobierno de Aragón para minimizar las afecciones", es necesario "elaborar un plan" que minimice el impacto y recoja "una rebaja fiscal".

Los diputados Jesús Guerrero y Elena Allué aseguraron que la Comunidad está en una clara "desventaja competitiva". "Si tuviese una presión fiscal más cercana a la de otras regiones, habrían venido más empresas catalanas a Aragón", exponen.

Ambos recuerdan que "no se sabe nada más" sobre la mesa de trabajo que formó la Consejería de Economía junto a empresarios, sindicatos y economistas, así como que el observatorio que se iba a impulsar junto a la Universidad de Zaragoza aún no se ha creado. En su opinión, el Ejecutivo autonómico "va tarde".

Ciudadanos, por su parte, opina que Aragón "tiene que ser atractiva empresarialmente siempre y para todas las empresas de España y del extranjero". La formación naranja cree necesario preguntarse "por qué no han venido más firmas catalanas" y, aunque defiende una reforma fiscal, aboga por desvincularla a la atracción de empresas.

Agravios comparativos

El Gobierno, en respuesta, asegura que en materia fiscal no va a haber cambios. Insiste, asimismo, en que se está trabajando para analizar los efectos de la crisis en el tejido empresarial local, si bien el área de Economía no puede concretar aún cuándo se constituirá el observatorio.

Para Podemos, la exigencia de reformas "llega tarde y no es realista". La formación morada considera que es la "catalanofobia" que han alimentado "ciertos partidos" la que "está teniendo consecuencias objetivas" sobre la economía aragonesa y descarta cualquier tipo de boicot a los productos catalanes.

CHA, en palabras de Gregorio Briz, cree que el sistema impositivo actual "no imposibilita la llegada o el desarrollo de empresas". A su entender, favorecer a las firmas aragonesas que más dependen de Cataluña "generaría agravios". "Es muy complicado, habría que ir caso por caso", dice.

IU, como el resto de partidos de izquierdas, cree que "no hay vinculación entre la presión fiscal y la atracción de negocios". Sí aboga, como señala Patricia Luquin, por "mimar a las pequeñas y medianas empresas aragonesas" y atender a sus necesidades para anticiparse al posible impacto de la crisis soberanista.

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