Las altas temperaturas registradas en Aragón durante los meses de junio y julio han tenido un reflejo claro en el número de personas atendidas en los servicios de urgencias hospitalarios. Según explicó ayer Francisco Javier Falo, director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, durante esos meses estivales se notificaron 88 atenciones en las urgencias de los centros públicos de toda la Comunidad por patologías relacionadas con las altas temperaturas (desde lipotimias y deshidrataciones a golpes de calor). Solo en dos casos, el enfermo precisó ingreso hospitalario.

Falo destacó que el mayor número de atenciones en urgencias por motivos del calor (el 76% del total) se registró en el mes de junio. Para el director general de Salud Pública, estas cifras demuestran el impacto que las altas temperaturas tienen sobre la salud de los ciudadanos.

"Junio y julio han sido muy calurosos –recordó Falo–. Extremadamente caluroso en el caso de junio. Lo que se ha traducido en un empeoramiento de los procesos más graves, lo que en consecuencia, se ha notado en las atenciones de las urgencias hospitalarias".

Falo explicó también que esta situación ha llevado a que durante un periodo de tiempo "significativo" se haya superado el umbral de casos esperados de atención en las urgencias hospitalarias. Desde Salud Pública se explicó que para el cálculo de este baremo se han utilizado las cifras de atenciones en urgencias de los últimos cinco años.

Así, en Huesca capital las urgencias superaron su umbral de casos esperados atendidos durante 3 semanas; en Teruel se superó en 5 semanas y en Zaragoza capital se superó en 6 semanas. Asimismo, Falo apuntó que se han incrementado las patologías específicas relacionadas con el calor en más de un 40% en estos dos meses.

"Todo ello pone de manifiesto –dijo– el efecto que las altas temperaturas tienen sobre la salud de la población". Por lo que insistió en la importancia de adoptar medidas de protección: "Las olas de calor, las temperaturas altas y prolongadas afectan a la salud de los ciudadanos de manera importante", concluyó.

Desde Salud Pública se remitió ayer una nota de prensa en la que se recuerda que el plan para la prevención de los efectos de las temperaturas extremas sobre la salud en Aragón tiene el objetivo de prever posibles problemas para la salud de los ciudadanos.

"En general, las temperaturas excesivas afectan desde un punto de vista sanitario más a las personas mayores, niños y aquellas que tienen enfermedades crónicas, recordó la nota de prensa. Otros factores como determinados tratamientos médicos, trastornos de la memoria, enfermedades agudas o consumo de alcohol u otras sustancias también se han descrito como de riesgo", explica la nota. Asimismo, recuerda que las personas más vulnerables son aquellas que tienen menos recursos (con imposibilidad de refrigerar sus viviendas o acceder a sitios refrigerados), con discapacidades, dependencia, aislamiento y marginación.