A diferencia de ejercicios anteriores, este año el Gobierno de Aragón no presupuestó ingresos por venta de patrimonio y, a la vista de lo ocurrido, fue una decisión acertada. 2016 se cerrará con apenas 290.000 euros recaudados por esta vía, los que se consiguieron en la subasta celebrada el pasado julio, cuando se pusieron a la venta bienes valorados en 11 millones. Aunque estaba previsto celebrar otra puja este mes, finalmente el Departamento de Hacienda ha optado por suspenderla.

Según explicaron fuentes de la Consejería que dirige Fernando Gimeno, la razón de que se haya pospuesto la que será la segunda subasta organizada por el Ejecutivo PSOE-CHA es que se quiere incluir en el lote el antiguo juzgado de menores de la calle de Lagasca, desocupado desde 2013. La DGA solicitó al Ayuntamiento de Zaragoza un cambio de uso del inmueble, que exige una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), y un aumento de edificabilidad. Este incremento tiene como objetivo poder mejorar la accesibilidad, ya que actualmente solo se puede acceder al piso más alto del chalé a través de una escalera de caracol y se requiere instalar un ascensor exterior.

Los trámites se iniciaron hace ya más de dos años y ayer el Ayuntamiento no quiso detallar en qué punto está el expediente.

Junto al edificio de Lagasca, el Gobierno de Aragón pretende volver a ofertar en la próxima subasta, previa revisión de los precios, los bienes que quedaron desiertos en la puja de julio, cuando solo logró recaudar el 2,6% de lo previsto. De los 19 inmuebles y cuatro vehículos que se pusieron a la venta, únicamente encontraron comprador un piso y dos coches, por los que se pagó un 75% del precio de salida, una opción de descuento que se estrenó en esa convocatoria.

Tras la subasta, los lotes sin comprador pueden adquirirse mediante adjudicación directa por el precio de licitación establecido, pero de momento, según explicaron fuentes de Hacienda, nadie ha mostrado su interés por hacerse con los inmuebles o coches. Entre ellos, figuran la antigua hospedería de Arguis, de la que la DGA lleva intentando desprenderse sin éxito desde 2014. Salió por 1,4 millones. También hay un piso en la céntrica calle Costa de Zaragoza, por 551.000 euros, un local junto a la plaza del Pilar valorado en 970.000 euros o una parcela en Plaza que cuesta más de 1,5 millones. Por lo que respecta al parque automovilístico, el Ejecutivo quiere deshacerse de dos Audi A8 que utilizaban los expresidentes Marcelino Iglesias y Luisa Fernanda Rudi. Uno de ellos está blindado y sale por 22.983 euros y el otro, por 14.630.