Los Tigres de Atades apuran sus colonias de verano en Palamós

Los usuarios del club de ocio y tiempo libre Los Tigres de Atades también disfrutan de sus vacaciones de verano este mes de agosto. En concreto, un total de 68 personas con discapacidad intelectual, acompañadas por 25 voluntarios, se desplazaron la semana pasada hasta Palamós, donde estarán hasta el próximo sábado, momento en el que dirán adiós a las colonias de verano.

Allí, divididos en tres grupos según los ritmos de actividad, conviven y comparten actividades muy variadas con un albergue como centro de operaciones y bastión de descanso. En él no faltan los chapuzones en la piscina, los talleres de manualidades, el deporte, los juegos acuáticos y las actividades de relajación. Además, sus jornadas finalizan cada día con una velada en la que el baile es protagonista.

La playa, un parque acuático o el Museo de la Pesca han sido algunos de los lugares que han visitado estos días los 68 integrantes de la expedición, que también han salido a cenar y a degustar más de un helado. “Ellos viven con mucha ilusión estas colonias, pues para la mayoría son sus únicos días de vacaciones durante el año. Incluso para algunos, es también la primera vez que salen de la residencia en el curso”, cuenta Asunción Guillén, una de las coordinadoras del club de Atades.

Estos diez días de vacaciones son concebidos por la organización como un espacio temporal para el ocio, la convivencia y el reencuentro de los usuarios con sus amigos y compañeros, así como sirven también para mejorar su autonomía. Mientras, para las familias, este periodo supone una “semana de respiro, igualmente necesario para ellas”, detalla la técnica de Los Tigres de Atades.

El pasado mes de julio tuvieron lugar las primeras colonias estivales en las que un grupo de 52 personas y 20 voluntarios se instaló igualmente en la localidad gerundense. Por primera vez desde que se desarrollan estas particulares vacaciones –comenzaron hace más de veinte años-, se han organizado dos turnos para poder ampliar la capacidad de asistentes. “En ellas puede participar cualquier socio del club Los Tigres, desde los 18 años hasta los 70, edad de la persona más mayor que ha viajado este verano con nosotros”, cuenta Asunción Guillén, quien apunta que el haber podido desdoblar grupos en esta ocasión y el estar cerca del núcleo urbano les permite realizar más actividades fuera del albergue.

Y entre ellas, una de las preferidas por gran parte de los viajeros es la escapada nocturna en la que cenan y salen de fiesta en la localidad. “Este tipo de momentos favorecen la inclusión en el entorno de los usuarios y potencian el contacto con otras personas, uno de nuestros objetivos”, señala Guillén.