En poco menos de dos horas, los colegios aragoneses se convierten, cada día, en un hervidero de bandejas, comida y bullicio. Durante ese tiempo, los alumnos que utilizan el servicio de comedor se quedan a cargo de las monitoras, que desde hace tiempo han reclamado mejores condiciones.

Ahora, al menos una de ellas se cumplirá. El Gobierno de Aragón publicó ayer en el BOA una bajada de ratio en los servicios que prestan estas profesionales. A partir de ahora -la orden entra en vigor desde el día siguiente a su publicación en el boletín- habrá una trabajadora (casi todas son mujeres) por cada 22 alumnos en Primaria (ahora es 1 por cada 25); y otra por cada 13 en Infantil (ahora, cada 15). También bajan en Educación Especial (una trabajadora por cada 7) y en Secundaria.

La reducción de la ratio es una de las demandas del colectivo, especialmente con la implantación de la jornada continua y el previsible descenso del número de usuarios del comedor. Además, aunque el volumen de niños a atender esté fijado en un número, normalmente estas trabajadoras asumen a más niños si no se cumple el cupo para poner a otra compañera. Esto, sobre todo, complica bastante el día a día con los escolares más pequeños, de 3 o 4 años,

"Es una buena noticia, ahora sobre todo que creemos que descenderá el número de niños que se quedan al comedor", explicó Montserrat Garós, representante del sindicato UGT. Por un lado, en algunos centros han comenzado a aprobar la jornada continua, lo que desincentivará a más familias de usar este servicio, que además es de pago.

Por otra parte, cada vez hay más colegios que reducen el tiempo para comer (pasando de tres horas a dos), lo que supone una importante merma en su salario, ya bastante reducido.

Otra novedad es que el número de trabajadoras no estará vinculado al número de menús que se pidan. Estas trabajadores insisten en que no siempre se piden tantos como son necesarios, lo que hace que se llegue a prescindir de ellas "sin motivo objetivo". En la orden que se publicó ayer en el BOA se especifica que "para el cálculo de las ratios se computarán los comensales de cada nivel educativo, matriculados al comienzo del curso escolar". Y se añade: "El número de monitores existentes variará en función del número de altas y bajas que se produzcan en el número de comensales durante el transcurso del curso escolar".Pendientes del nuevo concurso

Esta era una de las novedades que se esperaban para el curso que viene, como lo son las condiciones del nuevo concurso del servicio de comedores escolares para los próximos cuatro años, que aún no ha salido a licitación.

Apriori, la DGA dará más puntos a las empresas que eliminen el panga y las comidas precocinadas de sus menús. También valorará los que eliminen las barquetas de plástico en el proceso de cocinado, envasado y calentamiento de la comida.