Más de 14.000 dependientes aragoneses siguen sin recibir la ayuda reconocida

Pese a la tendencia positiva con la que terminó 2015, Aragón ha comenzado el año con un balance negativo en la dependencia. En febrero, 14.339 personas seguían sin recibir la ayuda aunque la tienen concedida, mientras que un mes antes se encontraban en esta situación 13.980. En total, en estos momentos se benefician de la prestación 17.648 aragoneses, un centenar menos que en enero (17.756).

El Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad publicó ayer a través de su página web el último informe sobre la gestión de la dependencia por comunidades, entre ellas, Aragón.

Según este mismo documento, 31.987 aragoneses tienen concedida la dependencia, de los que solo 17.648 cuentan con la prestación en alguna de sus modalidades (una cuantía económica, ayuda a domicilio, teleasistencia, plaza de residencia...). Así, son 14.339 los que se encuentran en lo que los expertos llaman el "limbo": con una prestación reconocida por la Administración pero sin recibirla.

De los beneficiarios actuales de la dependencia, más de 9.300 obtienen un apoyo económico por cuidados en el entorno familiar y unos 8.400 tienen concedida una ayuda vinculada a un servicio concreto que se le asigna según sus necesidades. Uno de los objetivos de los últimos años es intentar aumentar las prestaciones vinculadas a un servicio.

Ante las últimas cifras publicadas, el coordinador en Aragón de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales, Gustavo García, mostró su preocupación por el pequeño retroceso de febrero después del incremento de 752 beneficiarios que se registró en el último tramo de 2015. De hecho, los directores y gerentes en Servicios Sociales se mostraban optimistas hace unas semanas por esta tendencia tras el terrible varapalo que ha sufrido la dependencia en la última legislatura.

El cumplimiento de la ley de la dependencia siempre ha sido un muro prácticamente insalvable por la mayoría de las comunidades autónomas, incluida Aragón. Ningún Ejecutivo ha conseguido reducir las "listas de espera" para esta ayuda así como los plazos para su concesión. Hay casos en los que los beneficiarios llevan más de dos años esperando esta prestación.Falta de financiación

El principal escollo al que siempre se ha tenido que hacer frente es la falta de dinero para financiar la ley. Oficialmente el Gobierno central y los autonómicos tienen que sufragar a partes iguales su coste, pero la realidad es bien distinta. Según ha denunciado en numerosas ocasiones la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, esta proporción no se cumple y desde Madrid apenas llega actualmente un 19% del gasto, por lo que Aragón tiene que hacerse cargo del 81%.

Broto reconoció la difícil situación en la que se encuentra la ley de la dependencia, ya que en julio del año pasado, cuando llegaron al Gobierno, un 30% de las personas que tenían reconocida la ayuda no la recibían. No obstante, aseguró que se van a invertir todos los esfuerzos para revertir la situación. De hecho, hizo hincapié en que se va a "agotar" hasta el último euro del presupuesto destinado a esta ley.

Una de las últimas novedades incorporadas es la puesta en marcha de un proyecto de estancias nocturnas en residencias para los grandes dependientes (grados II y III). De momento, la iniciativa ha comenzado de manera experimental en la residencia Romareda, en la que se han ofertado cuatro plazas.