Las negociaciones para la Moncloa ponen en cuestión el plan del Ebro y las comarcas

Todos los pactos tienen un precio y a Aragón le va a tocar pagar una parte si las negociaciones que ha puesto en marcha ahora el PSOE para acceder a la Presidencia del Gobierno terminan en éxito. La reforma del plan de cuenca del Ebro (para dar más peso al Delta y menos al agua reservada para Aragón), el cambio en la política territorial (con una redefinición de los pequeños ayuntamientos y las comarcas), una nueva ley electoral (con más peso de las grandes ciudades frente a provincias poco pobladas como Teruel y Huesca), el cambio hacia una economía "verde" (con la completa desaparición de la minería) y la financiación autonómica son algunos de los asuntos que los partidos que han pasado ya por la primera ronda de negociaciones en el Congreso quieren promover en caso de que formen parte del nuevo Gobierno de España.

De momento, PSOE y Ciudadanos ya han anunciado que priorizarán dos de ellos en la primera fase de la negociación. El socialista Pedro Sánchez ha marcado como uno de los siete ejes de pacto "abrir una transición energética en nuestro país que haga frente a la lucha contra el cambio climático y el impulso a la economía verde". Parece claro que en el planteamiento del líder socialista no cabe el apoyo para mantener en funcionamiento el sector de la minería, aunque sí las ayudas para su reestructuración.

Por su parte, la propuesta formal de Ciudadanos exige ya la reforma de la ley electoral. El partido la considera "prioritaria" en su negociación para apoyar a Pedro Sánchez en la sesión de investidura. Reclaman "una ley justa y proporcional" que "garantice la igualdad de voto de todos los españoles". Aunque como principio puede parecer legítimo, de consumarse supondría que Huesca y Teruel tendrían aún menos representantes en el Congreso que ahora. Hay que tener en cuenta que Podemos e IU –también posibles socios delPSOE– coinciden en reclamar una reforma electoral que dé aún más peso a las provincias más pobladas.Manifestación en Amposta

Otra de las preocupaciones que puede tener Aragón ante los pactos en el Congreso es un posible cambio en la política hidráulica. El presidente de Aragón, Javier Lambán, ya ha advertido al responsable del PSOE para liderar las negociaciones, Antonio Hernando, que este asunto debería quedar excluida de ellas.

Hay riesgo por ambos lados. Por un lado, Podemos llevará al primer pleno de esta legislatura una iniciativa para derogar el actual plan de cuenca del Ebro. Por el otro, Ciudadanos reclama un nuevo PHN y no se ha cerrado a la posibilidad de plantear trasvases, aunque también es cierto que desde la campaña electoral no ha retomado este asunto.

La iniciativa de Podemos sobre la gestión del Ebro, liderada por el principal dirigente en el Congreso de En Comú Podem, Xavier Domènech, pide revisar los caudales ecológicos de dicho río, con el objetivo de garantizar más agua en el Delta y, por tanto, menos en la parte aragonesa de la cuenca.

Esta iniciativa también está apoyada por los dos diputados aragoneses de Podemos en el Congreso, Pedro Arrojo y Jorge Luis, quienes defienden que la DGA no puede pretender "poner fronteras al Ebro" y reivindican que se paralicen obras hídricas como el embalse de Yesa. Precisamente, todos estos dirigentes participarán hoy en una manifestación en Amposta "en defensa del Delta". Además, CHA también ha anunciado que irá. Es decir, los dos socios del PSOE en Aragón se van a manifestar hoy en Cataluña a favor de más caudal para el Delta. Según informó Podem en Comú, a la manifestación también acudirá el PSC. De momento, el grupo del PSOE en el Congreso todavía no ha aclarado si apoyará o rechazará la iniciativa a favor de derogar el actual plan del Ebro.