El frenético periplo de los Reyes Magos llevará a sus Majestades de Oriente a recorrer casi todos los rincones de la geografía aragonesa utilizando medios de transporte de lo más dispares. En esquís, tractor o a caballo, sus majestades harán lo que haga falta por recoger las cartas de todos los niños de la Comunidad.

Comenzarán la jornada esquiando en Cerler para saludar a los niños del valle de Benasque y repartir caramelos mientras se deslizan por la nieve. A las 11.00 estarán ya en la estación de Formigal-Panticosa para recorrerla valle a valle y por la tarde, a las 18.30, descenderán con antorchas la Pista Grande de Candanchú siendo los primeros en deslizarse este año por la estación.

El triunfo del tractor

El exigente recorrido de sus majestades permitirá a miles de niños de las tres provincias ver de cerca a los reyes, incluidos los nueve chiquillos de Báguenas y los de decenas de municipios con problemas de despoblación. Por desgracia localidades como Urriés o Navardún, con apenas uno o dos niños por cabeza, queden fuera del recorrido real.

La alcaldesa de Báguena, Pilar Rillo, se siente orgullosa por poder compartir la ilusión de este día con los nueve pequeños que residen en el municipio y los otros tantos que se acercarán desde pedanías y pueblos cercanos. Sus majestades llegarán sobre un tractor engalonado y recorrerán el núcleo al son de los villancicos. Tras adorar al niño Jesús en la iglesia, repartirán caramelos, regalos y globos a todos los niños.

Este esquema se repetirá a distintas horas y con pequeñas modificaciones en casi todas las localidades con cabalgata de reyes. Un remolque llevará a sus majestades hasta Abiego desde el monasterio de San Joaquín y los pajes alumbrarán con antorchas el camino de los reyes a su llegada a Bielsa. En Boltaña hay tanto trabajo que habrá tres pajes por rey y serán los propios vecinos del pueblo quienes lleven las antorchas. Además, la comitiva real lanzará caramelos en casi todos los municipios, excepto en Canal de Berdún, donde los reyes serán agasajados con un vino al fin de la cabalgata.

Las reinas magas de Aragón

En Canfranc sus majestades cambiarán el tractor por las pickup y se reunirán con sus tres reinas magas, tres figuras que ya son tradicionales de la localidad por lo que su alcalde no entiende "el revuelo" que se ha generado este año por la participación de las reinas magas en la cabalgata de Madrid. Entre los seis repartirán casi 400 regalos entre los niños -y no tan niños- de la localidad. En Barbastro la comitiva se ampliará aún más para lanzar "cientos de kilos de caramelos y chocolatinas" con la colaboración de los músicos, las majorettes y las damas de fiestas.

En Valderrobres los reyes entrarán montando a caballo y harán la primera parada en la residencia de mayores. También en Ariño los mayores serán los primeros en ver a los Reyes Magos pero aquí llegarán a pie rodeados por sus pajes y un nutrido grupo de odaliscas.

En Remolinos serán los propios niños de la localidad quienes agasajen a los Reyes Magos con un festival de variedades que ya acumula más de treinta años de tradición. "Lo preparan durante las vacaciones y actúan todos los niños por lo que se convierte en el evento con más afluencia de público del año", explica Alfredo Zaldívar, alcalde del pueblo. Al finalizar el espectáculo, los Reyes Magos visitarán en sus casas a los niños más pequeños de Remolinos como gesto de agradecimiento.