Medio centenar de investigadores de la UZ reclaman una subida salarial al Ministerio

Los salarios recogidos en la última convocatoria de los contratos FPU (Formación Profesorado Universitario) del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte están causando cientos de reclamaciones. La convocatoria para aquellos que vayan a iniciar su etapa doctoral en el curso 2016-2017 especifica un incremento salarial de cerca de 150 euros mensuales brutos. Si en las ofertas de los dos años anteriores -momento en el que pasó de ser una beca a un contrato- se detalla que los beneficiarios cobrarán 14 salarios brutos de 1.025 euros durante los dos primeros años y de 1.173 durante los tres siguientes, ahora se ingresarán 1.173 durante los cuatro años.

“En las convocatorias de 2013 y 2014 pone que 'cualquier incremento o reducción de las mencionadas ayudas que se produzca con posterioridad se aplicará a todos los contratos suscritos', por eso no entendemos que el Ministerio no lo haya aplicado”, explica Adrián Pérez, coordinador de los afectados. En España hay unos 1.500 investigadores en esta situación, de los cuales, cerca de 50 pertenecen a la Universidad de Zaragoza.

Pilar Giménez, que tiene un contrato de FPU en la rama de física desde el pasado mes de septiembre, está siendo la encargada de coordinar a los estudiantes de la Universidad de Zaragoza. "Tenemos un grupo de Facebook para dudas y allí se publicó que el Ministerio iba a subir el número de becas y su cuantía, por lo que desde el primer momento estuvimos muy atentos", recalca. Una vez publicado en el BOE, ha estado localizando a todos los alumnos de los dos cursos anteriores. 

Desde que se publicara en el BOE la nueva convocatoria, los afectados comenzaron a enviar correos electrónicos de manera individual al Ministerio, con su correspondiente respuesta negativa. “Así que decidimos coordinarnos y mandar un escrito conjunto”, sostiene Pérez. El resultado fue similar, por lo que redactaron una instancia al Vicerrectorado de Investigación de cada universidad y otra al Ministerio de Educación. “De este modo, tienen la obligación de contestarnos por escrito, ya que por correo electrónico -como habían estado comunicándose hasta entonces- no tiene ningún tipo de validez”, sostiene.

Después de varias comunicaciones, la última respuesta del Ministerio se centra en explicar que al ser convocatorias diferentes “no rige el procedimiento de concesión ni el régimen jurídico de otras ayudas posteriores”. Al mismo tiempo señalan que, a pesar de ello, están analizando la fórmula presupuestaria para que al inicio del abono de las ayudas convocadas en 2015, en el último cuatrimestre de 2016, también se eleve el importe de los sueldos que reciben los beneficiarios anteriores.

"De este modo, a los de 2013 ya no les afectarán porque empiezan su tercer año y, por consiguiente, la cuantía asciende a los 1.173 euros", recalca Giménez. Aún así, si finalmente se amplia el sueldo a los de la convocatoria anterior, el Ministerio deberá adjudicar una partida presupuestaria de 1,66 millones de euros. Esta cifra es bastante inferior a los 4,18 millones que serían necesarios si se empezaran a pagar los contratos desde este mes a las dos convocatorias anteriores.

Por su parte, la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) estudió su problema y especificó en un documento que “sería conveniente equiparar la dotación económica de los contratos predoctorales del Ministerio de Educación Cultura y Deporte (MECD) para aquellas personas que obtuvieron este tipo de contrato en 2013 y 2014”. Ante esta situación, la plataforma de afectados está estudiando la posibilidad de presentar un recurso de reposición y un contencioso ante la Audiencia Nacional. Además, han lanzado una recogida de firmas a través de la plataforma Change.org, que ya ha superado las 40.000. De hecho, la propia página web se ha puesto en contacto con estos estudiantes para difundir su causa. 

"Es el equivalente a un sueldo más"

Javier Sánchez, del departamento de Ingeniería Química de la UZ, es beneficiario de la convocatoria de 2014. En su caso, no se enteró de la subida salarial hasta que Pilar Giménez se lo comentó. “Ella es la que está coordinando todo y nos va informando de los avances que va habiendo”, explica. En su opinión este incremento es justo “ya que, de este modo, se equiparan nuestros salarios a los de los beneficiarios de otras becas del Ministerio como las FPI”.

De hecho, en su opinión, una vez publicada la convocatoria en el BOE, “se debe hacer efectiva la subida para que no haya discriminación profesional”. “Una discriminación salarial podría poner en riesgo el equilibrio de un grupo, en el que constantemente llegan nuevas incorporaciones, simplemente por pura envidia, lo que sería realmente triste”, sostiene.

Para él, los casi 150 euros brutos anuales de más supondrían una buena ayuda. “Estamos hablando de cobrar un sueldo más de lo que recibimos ahora, con eso se podrían afrontar varios meses de alquiler o pagar el recibo de la luz durante medio año”, ejemplifica.