Los senadores del Partido Aragonés han presentado 68 enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado para 2016 en las que plasma sus prioridades para la próxima legislatura y con las que pretende que el Gobierno entrante aumente las inversiones en la Comunidad en cuestiones fundamentales para su desarrollo.

Se trata, explican fuentes del PAR en una nota de prensa, de actuaciones o infraestructuras que esta formación considera "irrenunciables y vitales, y que no pueden quedar infradotadas o aplazadas sine die".

En materia medioambiental el Partido Aragonés ha pedido 36 millones para la descontaminación de las zonas afectadas por lindano.

Como el año pasado, ha defendido la necesidad de que el Estado contemple dotar de manera suficiente en los PGE 2016 el primer ejercicio de un convenio plurianual en condiciones similares a la inversión hecha en el pantano de Flix.

En materia de financiación los senadores aragonesistas solicitan una nueva Ley de financiación local que resuelva los problemas de los ayuntamientos y contemple, muy particularmente, su problemática en las poblaciones de menos de 20.000 habitantes.

En el capítulo de Fomento piden que se acelere la ejecución de las infraestructuras ferroviarias y carreteras estructurantes de Aragón.

En ese ámbito quieren que durante la próxima legislatura se garantice el impulso "necesario y suficiente" a los pasos transfronterizos de Canfranc y la TCP y al eje Cantábrico-Mediterráneo para "asegurar la conexión integral de nuestra comunidad con los principales nodos logísticos de Europa y del Mediterráneo y la conexión Zaragoza-Teruel-Valencia".

El PAR incide en la importancia de las conexiones con Francia, con especial atención a la reapertura del Canfranc y las dotaciones económicas necesarias para incluir en 2020 la TCP de nuevo en el mapa de redes transeuropeas.

También pide que se acelere el desdoblamiento de la N-232 desde Mallén hasta Figueruelas y desde El Burgo de Ebro hasta Valdealgorfa, ambos, recuerdan, considerados como puntos negros por su alta siniestralidad, y que se liberen los peajes de la N-II hasta Fraga, hasta que se ejecute su desdoblamiento.

Además de que se active la realización de los tramos pendientes de la A-21, A-22, A-23 y la N-260 en el acceso al Valle de Benasque y al de Ara en las comarcas de la Ribagorza y el Sobrarbe.

Entre sus principales reivindicaciones también se encuentran las de garantizar iniciativas que ayuden a paliar el problema de despoblación de muchas de las comarcas aragonesas, un Plan Integral del Ebro que incluya medidas de prevención y reparación de avenidas, actuaciones en cauce, riberas, motas y fomento de zonas inundables.

Así como que se garantice el acceso a la asistencia sanitaria a las personas que la precisen en cualquier parte del territorio español, fuera de su Comunidad de residencia, incluyendo las derivaciones a centros de referencia por enfermedades graves o raras y en particular a los residentes en las zonas limítrofes entre comunidades autónomas, atendidos en centros sanitarios de la comunidad vecina, como es el caso de miles de aragoneses.

En cuanto a regadíos el PAR demanda que se impulsen las infraestructuras necesarias para optimizar "nuestra potencialidad agrícola garantizando la puesta en marcha de nuevos regadíos y abastecimiento".