La consagración internacional del realizador español Alejandro Amenábar no ha sido producto de la suerte sino de la capacidad de este joven director para construir películas con una fuerza de atracción descomunal. Lo demostró ayer en la inauguración de la 63 edición del Festival de Cine de San Sebastián, en la que presentó fuera de concurso su primer filme después de seis años de ausencia. La sala grande del Kursaal se llenó para ver el primer pase, y los posteriores, de Regression, una película basada en hechos reales con la que se acerca a una América profunda en la que supuestamente se practican ritos satánicos. Con un reparto internacional, que encabezan Ethan Hawke y Emma Watson, el autor de Tesis, Mar adentro, Los otros o Ágora dirige su propio guión con un cuidado extremo de los detalles, con el magnetismo habitual, un ritmo narrativo que no flojea nunca y sabiendo, como siempre, tomarle el punto exacto a la temperatura de la historia. Aunque la película fue aplaudida, no obtuvo la calurosa acogida de otros de sus trabajos, aunque es seguro que será todo un éxito en taquilla cuando se estrene el próximo día 2 de octubre.
Mucho cine español
Con Amenábar se abría una sección oficial que hoy mismo entrará ya en materia cuando se presente
la primera de las producciones que compiten por la Concha de Oro. Se trata de Truman, de Cesc Gay, que es una de las seis españolas, o en coproducción con nuestro país, de cuantas figuran este año a concurso en la sección oficial. Como comentaba ayer,
la presencia nacional es muy destacada, incluyendo, además de los títulos en competición, otros como Mi gran noche, de Álex de la Iglesia, o Lejos del mar, de Imanol Uribe, además de, en Zabaltegi, La novia, de la aragonesa Paula Ortiz.
Frente a tanto cine español, y también iberoamericano, parece que el certamen sea en esta edición ligeramente menos internacional. Y no por los filmes que se van a pasar hasta el sábado 26, entre los que se incluyen algunos de Francia, Reino Unido y Japón, entre otros, como por la menor presencia de estrellas extranjeras. De momento, ni Ethan Hawke ni Emma Watson acompañaron ayer a Amenábar a la presentación de Regression. Esas ausencias, en cualquier caso, quedan compensadas por los muchos actores y directores españoles que han comenzado a llegar a San Sebastián. Entre ellos, Fernando Trueba, que hoy recibirá en el Palacio de San Telmo, de manos del ministro de Cultura, el Premio Nacional de Cinematografía. También, el realizador aragonés Nacho G. Velilla, la actriz Maribel Verdú y los actores Paco León, Javier Cámara o Antonio Resines, presidente de la Academia.
