El Amorebieta sorprende al Ebro
El conjunto vasco supo jugar sus armas y se llevó el partido explotando sus escasas llegadas al portal aragonés. El equipo de Larraz acusó el cansancio copero.
El primer acercamiento lo llevó a cabo Gabarre con un centro-chut que se marchó fuera. Corría el cuarto de hora de juego. Después, el Ebro estuvo cerca de anotar el primero de la tarde, pero Sergio Herrera voló para acabar desviando un tiro de Edu García. El cuadro de Larraz encontró una buena conexión por el costado izquierdo, con Sergio Martínez y Carralero.
El juego entró en una fase en la que costaba llegar a las áreas. Las retaguardias de ambos equipos se mostraban expeditivas. En la primera aproximación peligrosa de lo vascos, la incorporación por la banda izquierda de Ibai González, que apuró hasta la línea de fondo y centró al segundo palo, Iván Sales rozó el gol sorprendiendo con su llegada desde atrás, pero Montoya estuvo bien. Dos minutos más, tarde una falta lateral botada por Edu García estuvo a punto de acabar en gol. Morgado intervino de forma magistral para enviar el balón a saque de esquina tras el resbalón del portero.
En el 26 se rompió el empate. Iván Sales acertaba ante Montoya y decantaba la balanza a favor del Amorebieta. A los de Larraz les tocaba remar a contracorriente. El Ebro no se había recuperado del golpe cuando cinco minutos antes del descanso encajaba el segundo tanto. Una buena pared entre Ibai González y Goiría permitió al primero fusilar a Montoya. Efectividad máxima para el Amorebieta.
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El Ebro salió en la segunda parte en busca de un gol que le metiera en el partido. Adán Pérez lo intentó tras una buena combinación con Edu García, pero su remate no encontró portería. La entrada de Nacho Lafita por Gabarre provocó que Edu García se acostase a la izquierda, Adán se colocase de delantero centro y Carralero actuase por detrás del punta. Poco después, el propio Lafita ejecutó un saque de esquina y Álex García remató alto.
La última ocasión de los locales estuvo en las botas de Chema Pan, que había ingresado en el terreno de juego hacía unos minutos. Sergio Herrera detuvo su lanzamiento. El cansancio hizo mella y, en el minuto 83, Orbegozo estuvo a punto de marcar el tercero cuando se encontró solo ante Montoya, pero su toque sutil se marchó fuera rozando el poste. El Ebro ya no está invicto en su feudo. Tendrá que seguir luchando para obtener el objetivo.