Piden 9 años de cárcel para un anciano que quiso asesinar a su esposa por pedirle el divorcio

La Fiscalía acaba de solicitar una condena de nueve años de prisión por tentativa de asesinato para Jesús E. Z., un octogenario que no soportó que su esposa le pidiera el divorcio tras 53 años de matrimonio e intentó acabar con esta a golpes cuando dormía la siesta. Pero los planes del anciano no salieron como tenía previsto, ya que la víctima se despertó e intentó defenderse. En ese momento, el hombre cogió una almohada y la apretó contra la cara de su mujer con el claro propósito de asfixiarla.Sin embargo, tampoco esta vez logró darle muerte, ya que los gritos de socorro de la señora fueron escuchados por un vecino que acudió enseguida en su ayuda.

Los hechos se produjeron sobre las cuatro de la tarde del pasado 26 de enero en el domicilio que la pareja compartía en la calle de María Aragón del barrio zaragozano de Las Fuentes. Según el escrito de acusación del ministerio público, hacía tiempo que el procesado llevaba una vida bastante independiente y ni siquiera comía con su esposa. De hecho, parece que este había entablado una nueva relación con otra mujer y fue al verlos juntos cuando la víctima decidió plantearle el divorcio.

El acusado se presentó aquel día en casa sobre las dos de la tarde, algo que no era habitual y extrañó bastante a su esposa. Al parecer, acudió con la comida preparada para no tener que sentarse a la mesa con la víctima. Y cuando esta se fue a dormir la siesta, aprovechándose de su indefensión, Jesús E. Z. se introdujo en la habitación en la que la mujer descansaba.

"La agredió brutalmente golpeándole con fuerza y repetidamente la cabeza con un objeto contundente metido dentro de un calcetín", señala el fiscal. Según este, usó esta prenda para "en la medida de lo posible, evitar dejarle marcas que pudieran evidenciar que se trataba de una muerte violenta".

Sobresaltada por los golpes, la esposa llegó a incorporarse. En ese momento, su marido cogió la almohada y le tapó con ella la nariz y la boca. "Primero te mato y luego te tiro por el balcón", llegó a decirle el acusado mientras la sometía a tan cruel padecimiento.

En su desesperado intento por aferrarse a la vida, la señora gritó: "Auxilio", "Auxilio, que me matan". Lo hizo en varias ocasiones y sus ruegos fueron atendidos por un vecino de las plantas superiores, que no solo llamó a la Policía sino que bajó a la vivienda de la que procedían los lamentos y llamó a la puerta.El sonido del timbre descolocó al octogenario, instantes que aprovechó la víctima para salir corriendo por el pasillo en dirección a la entrada. Su esposo trató de impedírselo agarrándola del cuello y de todas las partes de su cuerpo, pero la anciana logró alcanzar la puerta y abrir a su vecino.

Según el ministerio público, el procesado quiso aparentar que nada ocurría, pero el rostro desencajado de la señora puso en alerta a su rescatador. De hecho, le ofreció ayuda y volvió a llamar al 091 para contar a los agentes lo que estaba pasando.

Ante la gravedad de los hechos y las importantes lesiones que presentaba la mujer, la titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Zaragoza decretó el ingreso en prisión provisional de Jesús E. Z., al que representa la letrada Noemí González.

Además de la pena de prisión, la Fiscalía pedirá durante la celebración del juicio que se prohiba al octogenario contactar o acercarse a su esposa durante un periodo de doce años. También exigirá que le indemnice con casi 5.000 euros por los daños causados.