El turno de Herrera
La convocatoria de Bono por Marruecos le abre la puerta del once. El guardameta madrileño deja atrás la fisura costal que sufrió en Cagliari.
El fichaje de Herrera, procedente del Elche, se fundamentó en la necesidad de contar con un cancerbero experto y contrastado. Un perfil en el que encaja como un guante. Sin embargo, el infortunio se cruzó en su camino una fatídica noche en Cagliari. En concreto, el pasado 28 de julio, cuando el Real Zaragoza perdió 1-0 contra el conjunto italiano. El portero fue destacado por Ranko Popovic como uno de sus futbolistas más destacados. Sin embargo, de vuelta a tierras aragonesas, Herrera se quejó de un molesto dolor en la zona costal derecha, que se le quedó muy resentida tras una caída en una salida al borde del área para arrebatar el balón por alto al delantero rival Melchiorri. En el lance, cayó sin control sobre el cuerpo del goleador italiano y se clavó una bota suya en el costado. "Tuve mala suerte. Me desequilibré y fui a caer justo sobre su pie. Enseguida vi que me había tocado las costillas. Es un golpe muy doloroso, pero confío en que no vaya a más", relató.
Se le realizaron inmediatamente unas radiografías para hacer una aproximación al daño. En estos primeros test se apreció que las fuertes molestias de Herrera en la zona costal derecha no derivaban de ninguna fractura o fisura de costilla. Ese primer diagnóstico dictaminaba un periodo de baja de unos diez días.
Pero los dolores persistieron y una resonancia magnética nuclear posterior del 19 de agosto estableció que sí que padecía una pequeña fisura en una costilla. Según señaló el club en un comunicado, "se puso de manifiesto la buena evolución de su contusión con fisura costal".
Como consecuencia, el jugador inició un proceso de recuperación en el que ha ido dando progresivos pasos adelante en el que cada avance ha sido un motivo de satisfacción. Paulatinamente se le pudo ver en mejor forma, realizando ejercicios aéreos de recepción de balón y corriendo junto al resto de la plantilla. Y el 24 de agosto pudo por fin lanzarse al suelo sin merma alguna, algo que no hacía desde hacía casi un mes. Aumentó la intensidad de los ensayos junto a Mikel Insausti el preparador de guardametas.
El pasado viernes 28 de agosto, justo un mes después de caer lesionado, volvió a entrar a la convocatoria para el choque contra el Almería en La Romareda, en el que fue suplente de Bono.
Sin embargo, para la cita del domingo en Butarque, el marroquí no se interpone en su senda. La Federación Marroquí de Fútbol comunicó el pasado 18 de agosto la convocatoria de Yassine Bono para el partido oficial que el combinado africano jugará ante Santo Tomé y Príncipe el próximo sábado 5 de septiembre, del grupo clasificatorio para la Copa de África de 2017.
Ante Herrera se dibuja la posibilidad de reivindicarse y esgrimir los motivos que alimentaron su fichaje. Sus cualidades son muy del gusto del cuerpo técnico zaragocista, que espera darle continuidad. Su experiencia con dos equipos con los que ascendió a Primera División (con el Levante en 2006 y con el Elche en 2013) se antoja un elemento esencial para lograr la fórmula del éxito en el presente ejercicio. Además, las convocatorias de Bono con Marruecos no serán una excepción.
Quien sí podrá estar en Leganés si Ranko Popovic lo cree oportuno es Jesús Vallejo. El central aragonés se enfrentará hoy en Tallin a Estonia (18.45) en el primer partido de la fase de clasificación al Campeonato de Europa de 2017 que se disputará en Polonia. Todo parece indicar que ocupará un puesto en el once titular confeccionado por el exzaragocista Albert Celades.
