El tenista español avisó de que sería difícil volver a ver al mejor al mejor Rafa Nadal, una opinión que comparte su técnico. "Será complicado que ahora pueda jugar desde el primer momento tan agresivo como lo hizo hace dos años", afirmó el entrenador catalán, justo después de que su pupilo ganara con Fernando Verdasco su primer partido de dobles.

Ahora, al balear se le presenta una buena oportunidad para intentar seguir con la inercia positiva que empezó sobre la tierra batida de Hamburgo y en el torneo canadiense tiene una oportunidad de oro. El año pasado se perdió la gira norteamericana (Cincinnati, Canadá y US Open) por sus problemas físicos, y esa situación adversa en aquellos días se torna en positiva en este 2015.

Ayer se impuso al ucraniano Stakhovsky, pero el sorteo le ha deparado un difícil reto. Si todo marcha como debe y ni Nadal ni los grandes favoritos de su parte del cuadro caen de forma prematura, el español se cruzaría con rivales complicados. En cuartos de final, le esperaría Kei Nishikori, que estrena su cuarto puesto mundial. Es la primera vez que el japonés, reciente ganador del torneo de Washington, alcanza un lugar tan alto en la clasificación mundial, lo que demuestra su sobresaliente progresión y estado de forma. En semifinales, un clásico siempre difícil: Andy Murray. Y en caso de llegar a la final del torneo y si todo transcurriese por su cauce habitual, se vería las caras con el número uno, Novak Djokovic.

Además de recuperar posiciones en la clasificación mundial y de seguir mejorando sensaciones, el jugador español ha llegado a a Canadá con el punto de mira en el US Open del próximo mes de septiembre.