El doctor Val-Carreres, amigo personal de la familia Rivera, se mostró "satisfecho" de la evolución del diestro, que sigue, no obstante, ingresado "grave" en la unidad de cuidados intensivos.

En una multitudinaria rueda de prensa, y ante la presencia de medios de comunicación de toda España, el cirujano zaragozano se mostró reservado sobre el futuro inmediato de Paquirri ya que sufrió "una herida muy extensa, enorme, que al tratarse del aparato digestivo exige, al menos, cinco días de respeto para ver cómo evoluciona" y salir del periodo crítico.

"El torero está estable hemodinámicamente, tiene buena circulación periférica y mantiene funciones respiratorias, renales y cardiacas dentro de la normalidad", añadió el parte médico, en el que se resaltó que "la herida presenta buen estado" y que el pronóstico "continúa siendo grave".

Paquirri fue trasladado por deseo propio el pasado martes por la tarde desde el hospital San Jorge de Huesca al hospital Quirón de Zaragoza para seguir recuperándose de la grave cogida sufrida en la primera corrida de San Lorenzo, el pasado lunes. En la capital aragonesa, Paquirri estuvo ayer acompañado por su mujer, Lourdes Montes, embarazada de ya casi nueve meses, así como por su hermano, Cayetano, y amigos de la familia, como el periodista José María García, padrino del torero.

Ante la pregunta por la posible reaparición en las plazas de Paquirri, el doctor Val-Carreres no se pronunció, pero sí resaltó la condición del torero como un "paciente colaborador y con la moral alta de un hombre fuerte". Además, a priori, al diestro, pese a la fuerte cogida, "no tendrá secuelas de las heridas". Val-Carreres descartó también la necesidad de someter al paciente a una nueva operación quirúrgica.