Tevenet presentó un once completamente renovado respecto al derbi ante el Real Zaragoza para dar oportunidad a los dos recién llegados, a la pareja de mediocentros formada por Íñigo Ros y Bambock con Samu Sáiz como enganche con la parte de arriba donde alineó a Darwin Machís y José Gaspar, ambos jugando a pierna cambiada. Se quedaron fuera de la convocatoria el portero Óscar Whalley, que dejó su sitio a Zaparain, y el delantero zaragozano David Mainz, que todavía sigue con molestias.

Los primeros 15 minutos fueron de dominio azulgrana. El venezolano Machís confirmó las buenas sensaciones que dejó en la media hora que jugó el viernes en su debut con una velocidad que trataron de aprovechar Gaspar y Samu dándole pases en largo y a la espalda de la defensa.

La SD Huesca trataba de ahogar la salida de la UD Logroñés y precisamente de un robo de balón de Luis Fernández nació la jugada del gol. El balón le llegó a Samu, que lanzó un gran pase en profundidad a Machís, que se quedó solo ante Fermín batiéndole por el segundo palo.

Llegaron entonces los mejores minutos del Logroñés con varias ocasiones seguidas gracias a su verticalidad. Sin embargo, los tres disparos casi seguidos se marcharon fuera. No obstante, en el minuto 30 la balanza del partido se equilibró con un afortunado gol de los riojanos. Una falta cerca de la frontal lanzada por Chevi se coló por entre la barrera oscense y el balón golpeó en la espalda de Iker Alegre, desviando la trayectoria sin que Leo Franco pudiera hacer nada por atajarla.

El técnico del Logroñés comenzó con el carrusel de cambios (llegó a utilizar hasta 25 jugadores) y el Huesca volvió a recuperar un poco el control del juego aunque en el último minuto del primero tiempo fueron los riojanos los que tuvieron una oportunidad para desnivelar el marcado que esta vez sí desbarató el guardameta argentino.

En el arranque de la segunda mitad, el control del balón fue de la UD Logroñés, que pudo subir el 2-1 al marcado en el 9, pero el disparo local se marchó desviado. Dos minutos después, el extremo canario Tyronne, que había entrado tras el descanso por Gaspar, tuvo una gran oportunidad después de que Luis Fernández le dejara un centro de cara dentro del área, pero su golpeo se marchó lejos de la portería que en ese momento defendía Miguel Martínez, con pasado azulgrana.

En el minuto 29 llegó la polémica del encuentro después de que Manolo, que venía caliente de una falta que no le habían pitado a su favor, provocara su expulsión tras una fea entrada con los tacos a la altura de la rodilla sobre Titi. La acción provocó una tangana entre los dos equipos.

Pese a quedarse con diez, la SD Huesca apenas sufrió en el tramo final del partido. Lo más destacado hasta el pitido del árbitro fueron dos faltas lanzadas por Fran Mérida desde ambas bandas que no encontraron rematador.