Levantan una calle peatonal reurbanizada hace tres meses
Los trabajos de reparación de una tubería obligan a quitar el pavimento en la calle
de Ramiro el Monje.
La concejal de Urbanismo, María Rodrigo, explicó que hay una obturación de la tubería provisional (un doble tubo de PVC) surgida a consecuencia de una deficiencia detectada en la ejecución de la obra. "Fue la propia empresa que realizó la obra, Obearagón, la que detectó la obra y aunque el agua no llegó a aflorar a la superficie se comprobó que había una fuga", comentó la concejal.
Se le dio una solución provisional, pero ahora será necesario acometer una reparación definitiva. "Se va a sustituir la doble tubería de plástico por una de hormigón, lo que obliga a demoler el pavimento de adoquín", indicó la portavoz municipal.
Tras retirar el adoquín, se abrirá una zanja para encontrar el enganche de la tubería que se tiene que sustituir y se colocará aproximadamente un metro de tubo de hormigón prefabricado partiendo del pozo existente en esa calle. Se prevé que estos trabajos se prolonguen durante dos o tres días, aunque el nuevo pavimento requerirá de unas tres semanas para asentarse con el fin de evitar su deterioro. "En todo caso, está previsto que las obras estén finalizadas antes de las fiestas de San Lorenzo", aseguró Rodrigo.
La reurbanización de Ramiro el Monje y parte de la plaza de San Pedro era un proyecto incluido en el programa Urban 2007-2015 y se llevó a cabo al final del anterior mandato municipal. Las obras se adjudicaron a la empresa Obearagón por 408.654 euros.
