Las faltas injustificadas al puesto de trabajo crecieron en el conjunto del Estado el pasado año por vez primera desde que arrancó la crisis. Al cierre de 2014, la tasa de absentismo laboral se situó en el 4,4%, cuando un año antes era del 4,1%, según refleja el último informe de Adecco en esta materia.

La tasa no había dejado de caer durante los últimos seis años -en 2007 era del 4,9%- y el repunte, apuntan desde la consultora de recursos humanos, se debe a que "el efecto crisis en las ausencias en el puesto de trabajo ha agotado su potencial".

Aragón destaca entre las comunidades con más horas no trabajadas por empleado (91,38 al año). Concretamente es la tercera, solo por detrás de País Vasco y La Rioja. "Tiene que ver con las negociaciones y convenios colectivos de cada comunidad, el nivel de industrialización y la distribución de los festivos", explica Javier Blasco, director de la asesoría jurídica de Adecco y coordinador del informe.

La tasa de absentismo se define como el porcentaje de horas no trabajadas -sin contar vacaciones, festivos ni horas perdidas debido a EREs- respecto a la jornada pactada por convenio o contrato. Desde los sindicatos se desvincula este aumento de "una supuesta recuperación" y se achaca a "trabajos más precarios, con peores condiciones y que exigen más horas fuera de lo marcado por contrato".

En materia sanitaria, una de las afecciones que más incumplimientos de jornadas laborales provocan son las alergias: casi dos semanas al año de media a quienes las padecen.

Por sectores, la tasa de absentismo se situó en 2014 en el 4,5% en los servicios, en el 4,3% en industria y en el 3,1% en construcción. El informe señala además que la problemática supone cada año unos costes directos de 4.768 millones de euros a la Seguridad Social por prestaciones económicas, y de 4.503 millones a las empresas por el abono de la prestación económica en los primeros días de baja.

Propuestas de la DGA

El Ejecutivo autonómico elaboró al comienzo de esta última legislatura un estudio del mercado laboral aragonés y del absentismo. En las conclusiones se valoran positivamente herramientas como el teletrabajo, la flexibilidad horaria, los salarios ajustados a la productividad o la polivalencia de los empleados para frenar las faltas injustificadas al puesto de trabajo.

7,3 horas extraordinarias al año

Aragón es la quinta Comunidad donde más horas extra realiza cada trabajador (y cobra por ello). La autonomía con la que desarrollan su actividad los profesionales influye de manera directa en el volumen de horas extraordinarias registradas. En este sentido, Cataluña y Madrid son las dos regiones donde se realizaron más horas extraordinarias en 2014, con 9 y 8 horas respectivamente, según los datos la EPA y de la Encuesta Trimestral de Costes Laborales.

Le siguen Castilla-La Mancha y Murcia, con 7,4 horas extraordinarias por trabajador al año; Aragón, con 7,3 horas; y Navarra, con 7,1. Estas son las seis comunidades que se sitúan por encima de la media nacional (6,75 horas extraordinarias por trabajador). En Aragón, los profesionales del sector de la industria son los que realizan más horas extraordinarias, con un promedio de 12,15 horas por cada trabajador.