Y la cigüeña llegó... 32 años después

En Embid de la Ribera, un barrio pedáneo de Calatayud, acaba de producirse el primer nacimiento de un bebé en más de tres décadas.

El pequeño Wael Benomar Chbab, con sus madre, Hassinae, y su padre,
El pequeño Wael Benomar Chbab, con sus madre, Hassinae, y su padre,
Abdelihah. Macipe

Embid de la Ribera, uno de los tres barrios rurales de Calatayud, ha recibido con cariño el primer nacimiento que se produce en este núcleo de población desde hace tres décadas. Es un niño, se llama Wael Benomar Chbab y es el primer hijo de una pareja que llegó desde Marruecos hace cinco años.


El alumbramiento se produjo el 7 de junio a las 20.13 en el hospital Ernest Lluch de Calatayud. Wael pesó 3,2 kilos y además de traer la felicidad a esta pareja ha alegrado a los algo más de 60 vecinos de este núcleo de población. "En Embid de la Ribera son todos muy buenas personas", dice Abdelilah, el padre, de 33 años y natural de un pueblo próximo a Larache. Hacía 32 años que los habitantes de esta pedanía situada junto a las Hoces del Río Jalón no celebraban la llegada de un recién nacido, así que, como comenta el padre, la felicidad es doble: por la llegada de su primer hijo y por la alegría que ha traído al pueblo. "Todos los vecinos son como nuestra familia aquí y entre ellos estamos muy bien", cuenta.


Abdelihah y Hassinae, la madre, de 18 años, están empadronados en este barrio bilbilitano, donde él lleva tiempo trabajando. El alcalde pedáneo de Embid de la Ribera, Jesús Ángel Hernández, dio a conocer el nacimiento de Wael porque ha sido todo un acontecimiento. "Nos hemos convertido todos en tíos y abuelos, es una maravilla, esto es una bendición", comenta muy contento. Un estado que comparte con sus convecinos. "Es un encanto de chavalín", dice, y además reconoce que está también el orgullo de que el niño esté empadronado en esta pedanía bilbilitana.


Una vez que esté terminada la campaña agrícola en este barrio en el que el campo es la principal actividad económica, todos los vecinos prepararán una fiesta para celebrar la llegada del recién nacido. Será hacía septiembre. Y si el nacimiento ha sido un hecho insólito en Embid, también ha sido relevante este mes, el cumpleaños de una vecina, Virginia Lázaro Melús, que ha cumplido 100 años.

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