Hay que recordar que este fue uno de los aspectos que obstaculizó que saliera adelante en la pasada legislatura la reforma del reglamento de la Cámara para dotarla de mayor transparencia y participación. "Es una obligación que tenemos con la ciudadanía", aseveró Cosculluela, en una conversación telefónica con este diario un día después de tomar posesión de su nuevo cargo. El aún alcalde de Barbastro y expresidente de la Diputación Provincial de Huesca (DPH) recordó que su partido ya publica en la web el patrimonio de todos sus cargos públicos y, aunque admitió que a algún grupo igual no le gusta, debe estar recogido en el nuevo reglamento.

Precisamente, Cosculluela –ya lo anunció en su primer discurso– se ha marcado como uno de los retos impulsar la reforma del reglamento. No quiso avanzar plazos a la espera de la reunión de la nueva Mesa y de los grupos parlamentarios, pero sí aseguró que "algún escollo" que había en la anterior tramitación es "salvable". "Hay que abrir el Parlamento a la calle y poder ver a través de la web qué hacen sus representantes. A veces existe desconocimiento de lo que hacen los diputados", manifestó el presidente de las Cortes, que recordó que la Comunidad tiene competencias muy importantes que afectan al día a día de los ciudadanos, por lo que reivindicó el papel de la Cámara.

Respecto a la posibilidad que se ha planteado de que todos los partidos tengan grupo parlamentario, independientemente de su representación (ahora son necesarios al menos tres diputados), el socialista se mostró partidario de que todos "tengan voz" en las Cortes y recordó que él ya puso en marcha esta medidas en otras instituciones en las que ha estado como la Diputación Provincial de Huesca. Aclaró, respecto a nuevas medidas de ahorro, que "se hará todo lo que sea necesario para el normal desarrollo de la institución". "Soy una persona austera", dijo.

Más allá del reglamento, Cosculluela hizo una llamada al entendimiento y al diálogo en su primer discurso. Y el pasado viernes, ahondó. "Si escuchamos la voz de la calle actuaremos con sensatez", dijo el presidente, que instó a articular canales de entendimiento "para hacer las cosas fáciles" consciente de que la fragmentación del Parlamento (hay siete partidos) promete una compleja legislatura. "Si no los ciudadanos, no lo entenderían", aseveró. En este sentido, se comprometió a ejercer como "árbitro" imparcial en el Parlamento pero reclamó el apoyo y la cooperación de los grupos. "Si no hacemos posible ese entendimiento, respeto y forma de consensuar las cosas, el presidente solo no puede", avisó.

Ninguna de las siete formaciones ostenta una mayoría suficiente para aprobar medidas en solitario, por lo que los acuerdos y las negociaciones serán una tónica habitual durante los próximos cuatro años. Prueba de esta necesidad de pactos son las negociaciones que las cuatro fuerzas de izquierda –PSOE, Podemos, CHA e IU– están llevando a cabo estos días para firmar un pacto de investidura. De hecho, en cuanto fructifiquen, Cosculluela iniciará la ronda de consultas con los grupos para designar a los candidatos a la presidencia de la DGA.