Pardo reconoce que hay "preocupación" y "enfado" en el PP tras perder la Diputación

Apela al debate interno para resolver esta situación y ha deja en manos de los afiliados la decisión sobre el futuro de la formación.

Pardo (2i) junto al resto de componentes de la corporación de esta última legislatura
Pardo (2i) junto al resto de componentes de la corporación de esta última legislatura
Diputación de Soria

El presidente saliente de la Diputación de Soria, Antonio Pardo (PP), ha reconocido que hay preocupación y enfados entre militantes y cargos de su formación en la provincia, por la pérdida de la institución provincial tras treinta años de gobiernos populares y el retroceso en las elecciones locales.


Pardo ha presidido este viernes el último pleno de la institución provincial, antes de la constitución el próximo 24 de junio de la nueva corporación, que estará presidida por Luis Rey (PSOE) en minoría, gracias a la abstención de los dos diputados de Ciudadanos.


El también exsecretario provincial del PP soriano ha reconocido que hay preocupación y "enfado" en el seno de su formación política por la pérdida de la institución provincial, fruto del retroceso sufrido en las elecciones locales del pasado 24 de mayo.


Ha apelado al debate interno para resolver esta situación política y ha dejado en manos de los afiliados la decisión sobre el futuro de la formación en Soria.


"Hay problemas serios y hay que tomar decisiones, pero pasarán por lo que digan los afiliados", ha resaltado.


El futuro presidente de la Diputación provincial, Luis Rey, ha avanzado que trasladará el modelo abierto y participativo implantado en el Ayuntamiento de Soria, dando voz a los colectivos sociales y económicos.


Rey ha asegurado que seguirá siendo concejal del Ayuntamiento de Soria e implicándose en la resolución de problemas.


Por su parte, el diputado de Ciudadanos y exprocurador del Partido Popular, José Antonio de Miguel, ha subrayado que el pacto firmado por su partido con el PSOE para apoyar su investidura "no es un cheque en blanco".


Además ha lamentado la descoordinación interna habida en la formación naranja en las negociaciones entabladas con PSOE y PP para garantizar la gobernabilidad de la Diputación provincial.


En este sentido ha apuntado que ha trasladado su queja a la organización provincial y regional, porque "las formas" no han sido las adecuadas y existía tiempo para cerrar el pacto y los flecos que todavía quedan pendientes de negociar, como las presidencias de las comisiones informativas o la composición de la junta de gobierno local.