Prisión para cuatro personas por prostituir a una joven e intentar venderla por 1.500 €

La víctima asegura que la tenían encerrada en un cuarto bajo llave y que solo la sacaban para obligarla a mantener relaciones sexuales.

El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Zaragoza investiga la denuncia por detención ilegal y explotación sexual presentada por una joven rumana a la que al parecer tenían encerrada bajo llave en un piso de la calle de La Paz y no dejaban salir más que para obligarla a mantener relaciones sexuales con clientes. Por estos hechos han sido enviadas a prisión cuatro personas, entre ellas, los hermanos Cornel

Eugen y Marius C., compatriotas de la víctima y quienes supuestamente la forzaban a prostituirse bajo amenazas y coacciones. Los otros dos encarcelados son una pareja de origen español que se encargaba de vigilar a la chica en la vivienda en la que estaba alojada.


La Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Policía inició la investigación en octubre de 2014, cuando la joven aprovechó un descuido de sus captores para escaparse del piso y acudir a presentar una denuncia en la comisaría de Las Delicias. Según explicó entonces a los agentes, fueron los hermanos quienes la engañaron y la convencieron para venirse a vivir a España. Lo que no imaginaba es que, nada más llegar a Zaragoza, iba a ser explotada sexualmente, quedándose Cornel Eugen y Marius con todo el dinero que pagaban los clientes.


La denunciante dijo que llegó a la capital aragonesa con los hermanos a través del aeropuerto de Garrapinillos, donde les esperaba Mireia, la mujer que ha sido también detenida y encarcelada por presunta trata de personas. Desde allí se fueron todos juntos en autobús a la calle de La Paz, donde quedó alojada la víctima y tenían lugar los encuentros sexuales.Querían venderla a un alemán


Asegura la denunciante que no solo la obligaban a acostarse con clientes, sino que también tenía que mantener relaciones sexuales con los dos hermanos contra su voluntad. Al parecer, la chica llegó a enterarse a través de Facebook de que los supuestos proxenetas tenían intención de venderla a un ciudadano alemán por 1.500 euros.


Dada la gravedad de los hechos, la juez de guardia decidió enviar a prisión tanto los hermanos como la pareja que vigilaba a la chica, a los que defienden los letrados Juan José Serra, José Luis Melguizo, Eloísa Gimeno y Mirta Manrique.