La comarca del Bajo Cinca quiere diversificar su oferta agrícola. Durante la última campaña, la saturación del mercado, que provocó la caída de los precios, así como el boicot ruso volvieron a poner de manifiesto la necesidad de contar con alternativas que alarguen el periodo de actividad y abran nuevos mercados. Actualmente, el 80 % de la superficie está dedicada al melocotón, la nectarina y el paraguayo. La producción sale hacia países europeos –entre ellos Francia, Alemania e Inglaterra– y al tratarse de productos muy concretos lo hace en un corto plazo de tiempo, lo que abarrota los mercados y hunde los precios. Atendiendo a esta situación e, incluso, ante la futura incorporación de nuevas zonas de regadío, es preciso diversificar los cultivos y para ello el Ayuntamiento de Fraga ha impulsado una finca de carácter experimental con el objetivo de estudiar nuevas variedades hortícolas y frutales.

"Ahora mismo, nuestro punto fuerte es el melocotón, la nectarina y el paraguayo, que se concentran en un plazo de tiempo muy corto; lo que pretendemos es ampliar el periodo de actividad y mercado con el fin de evitar la saturación actual, disponer de alternativas y amortizar nuestras instalaciones", subraya el alcalde de Fraga, Santiago Escándil. A lo largo de esta semana, han comenzado las labores sobre el terreno de la mano de los técnicos del Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA), que firmó un convenio de colaboración con el Ayuntamiento.

En total, la finca ocupa 2 hectáreas y, de ellas, el 80 % se reserva para ensayos agrícolas. Del conjunto, un 20% estará destinado a productos hortícolas. En concreto, las labores se han iniciado con la plantación de seis variedades diferentes de patatas y de forma posterior se hará lo propio con diferentes tipos de cebolla y brócoli. Los técnicos han elegido estos tres productos porque resultan "sencillos, tienen una buena salida e, incluso, están presentes en otras zonas de Aragón, lo que nos permite actuar desde la experiencia y contar con claros referentes", explica el técnico especialista de horticultura del departamento aragonés de Agricultura, Pablo Bruna.Variedades tempranas

Además de ello, se apuesta por variedades tempranas, es decir, que puedan recolectarse antes del 15 de julio, lo que evitará coincidir con el auge de la campaña de fruta y, al mismo tiempo, "adelantarnos al resto de zonas, lo que nos ofrecerá una importante ventaja respecto al resto de competidores", añade Bruna. A esto se une el hecho de que estos productos pueden cultivarse de forma extensiva. "Ahora mismo, ninguno de ellos tiene peso en el Bajo Cinca. De hecho, son productos que únicamente están presentes en la huerta familiar, si bien podrían llegar a comercializarse", aclara el concejal delegado de Agricultura, José Ignacio Gramún.

Al margen de los productos hortícolas, el resto de la finca se dedicará a la plantación de nuevos frutales, entre ellos almendro, higuera, granada o kiwi. En este caso, los árboles tardarán tres años en entrar en producción. Ante todo, se trata de experimentar y ofrecer alternativas al sector primario, especialmente ante la llegada de nuevas zonas de regadío. De hecho, cabe recordar que el proyecto del regadío social de Les Puntes sigue avanzando, lo que permitirá transformar alrededor de 2.700 hectáreas existentes entre los términos municipales de Fraga y la localidad de Torrente de Cinca.

En estas nuevas zonas sería fundamental apostar por nuevos productos, que sean rentables para el agricultor y que supongan una alternativa real, lo que acentúa la importancia de esta finca.Transferencia de información

En opinión de Gramún, "el agricultor no tiene margen de error, ya que las inversiones son muy altas y por ello es fundamental que la administración investigue sobre las posibilidades de los nuevos cultivos". De este modo, toda la información derivada de los ensayos será transferida de inmediato a los profesionales del sector agrario. "El objetivo es que este campo sirva de guía y, en un futuro, los agricultores sean capaces de elegir con garantías sus nuevos cultivos", añade Gramún.

A priori, el Ayuntamiento tiene previsto destinar los productos derivados de los ensayos a fines solidarios.Más de 1.000 explotaciones

El municipio de Fraga suma alrededor de 1.000 explotaciones agrícolas, que emplean a alrededor del 25 % de la población activa de la ciudad y que generan un volumen de negocio de unos 60 millones de euros.

Las cifras evidencian la importancia del sector agrícola en la capital del Bajo Cinca. Los profesionales del campo cuentan con un completo centro de servicios en las dependencias de Mercofraga, que albergan el área municipal de Agricultura y que están situadas de forma próxima a la ciudad, "que es lo más importante".

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