​El turismo rural aragonés, el segundo más barato de España

El número de establecimientos rurales en Aragón no ha dejado de crecer durante los últimos años.

Una casa rural, en Sabiñánigo.
​El turismo rural aragonés, el segundo más barato de España

El número de establecimientos de turismo rural en Aragón no ha dejado de crecer durante los últimos años. El año pasado, ascendían a 1.365, concretamente, un 65% más que hace diez años. Según los últimos datos publicados por el Instituto Aragonés de Estadística (IAEST), el número de plazas ofertadas supera las 10.200, la mayor parte de ellas –más del 50%- en la provincia de Huesca, seguida de Teruel (30%) y, finalmente, de Zaragoza.


Sin embargo, en el conjunto Español, Castilla y León, Cataluña, Andalucía, Castilla-La Mancha y el Principado de Asturias gozan de mayor y, además, todas excepto la zona de La Mancha, son los destinos preferidos por los viajeros. O así lo demuestra su comportamiento en el Primer Barómetro de Turismo Rural en España elaborado por Clubrural y el Departamento de Turismo de la Universidad de Nebrija.


Aunque, respecto al precio de este tipo de alojamiento, Aragón ofrece una de las ofertas más económicas del país junto a Murcia y Andalucía. El precio medio se sitúa entre los 15 y 20 euros. Desde la Federación Aragonesa de Asociaciones de Turismo Rural (FARATUR) aseguran que en Aragón no hay “ni mucho menos” un exceso de oferta en comparación con otros países europeos, aunque sí hay “demasiada para la demanda existente en la actualidad”. “En España tenemos en torno a 14.000 establecimientos de turismo rural, frente a los 27.000 que hay en Francia”, afirma Marco, que asegura que el problema radica en la sociedad: “Aquí no tenemos cultura de turismo rural, por lo que se hace necesario promocionar la atractiva oferta que tenemos en la Comunidad”.


El informe, elaborado con datos del tercer trimestre de 2014, también ofrece claves sobre cómo son los alojamientos rurales en España, cuál es el perfil del viajero y cómo se comporta al reservar. El turista rural busca mayoritariamente alojamientos de alquiler íntegro, también los más numerosos en España. También, el 52,2% prefiere estancias de entre 2 y 4 plazas, aunque la mayoría de ellas están habilitadas para grupos de entre 7 y 16 personas. En cuanto a los servicios, aunque el viajero busca, especialmente en verano, casas para ir con niños y que tengan piscina, aunque sólo el 23,7% de las estancias cuenta con servicios para los más pequeños, y el 37,6% dispone de piscina.

El número de alojamientos rurales ha aumentado en la última década

En 2003, el número de casas de alojamiento rural en Aragón apenas superaba las 800, con una oferta total de 8.600 plazas, tan solo un 20% más que en 2013. La posible explicación de esta predilección por los locales más pequeños radica en el inicio de la crisis económica. Fue entonces cuando algunos aragoneses con segundas viviendas en el medio rural vieron en el sector una alternativa al desempleo. “En los últimos años ha habido mucha gente que ha rehabilitado la casa que tenía vacía en el pueblo y ha montado una casa rural para intentar salir adelante”, explica Jesús Marco, presidente de FARATUR.


Esta tendencia al alza, tanto en el número de alojamientos como en el de plazas, se mantuvo durante la década de 2001 a 2011, cuando Aragón pasó de contar con 750 establecimientos hoteleros de este tipo a 1.400, casi el doble. De manera paralela, también creció el número de plazas ofertadas pasando de 8.000 a 15.000. No fue hasta el año 2012 cuando la tendencia se modificó y se dio la primera disminución en la oferta, con 70 alojamientos menos que el año anterior y una reducción de 5.000 plazas.