Tráfico da luz verde a las autoescuelas 'online' y desata las iras del sector

La DGT da luz verde a que los alumnos opten al teórico sin asistir a ninguna clase presencial.

Test de conducir para obtener el carnet
Test de conducir para obtener el carnet
C.M.

El sector de las autoescuelas se enfrenta a un nuevo conflicto con la Dirección General de Tráfico. En esta ocasión no tiene que ver con la crisis económica, con la caída de alumnos, ni con la falta de examinadores -problemas todavía latentes-, sino con los métodos docentes.


En concreto, la DGT ha abierto la puerta a la actividad de las denominadas autoescuelas 'online'. O lo que es lo mismo, aquellos centros de formación que no requieren de la enseñanza presencial a los alumnos que opten al examen teórico para obtener el carnet de conducir.


Esa es al menos la conclusión que se extrae de una reciente nota informativa emitida por la subdirección de Conocimiento Vial (antes Formación Vial) de Tráfico, en la que se estipula que “se podrán autorizar autoescuelas con enseñanza teórica online”, según denuncia la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE).


Una postura que contradice la defendida por ese mismo departamento este verano, cuando se argumentó que “no se puede autorizar una escuela donde la formación teórica se imparta con sistemas de enseñanza on-line, puesto que se perdería la interacción directa del profesor con el aspirante para poder desarrollar la función que el reglamento de escuelas le encomienda”.


Este cambio de opinión no ha sentado nada bien en el sector. Como explica el presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Zaragoza, Carlos Bricio, con esta medida “se pierde la labor de concienciación del profesor sobre el futuro conductor” y además “se desliga mucho la parte práctica de la teórica”, lo que perjudicaría la formación conjunta del alumno.


A su juicio, una educación vial sin los consejos y la instrucción de los profesores “atenta directamente contra la seguridad vial”, y se pregunta si, a partir de ahora también pueden hacerse 'online' los cursos de recuperación de puntos, ya que de ser así, “se perdería la eficacia de la reeducación”.


En la misma línea se posiciona CNAE (Confederación Nacional de Autoescuelas) cuyo presidente, José Miguel Báez, no termina de creérselo: “Es inaudito; de pronto, la formación a distancia posibilita ‘la enseñanza con todas las garantías de calidad’ y ello gracias a medios tan refinados como el correo electrónico y el teléfono; si esta doctrina prospera, la DGT habrá firmado la sentencia de muerte de la enseñanza presencial”, critica en la web de la asociación, donde también se recogen las impresiones de Francisco Paz, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Profesores de Formación Vial. En su caso, se resiste a “creer que la DGT sea capaz de autorizar una formación sin garantizar previamente la calidad de la misma, incumpliendo incluso los objetivos del Plan Estratégico de Seguridad Vial”.


Además, a la merma en la calidad de la enseñanza a los futuros conductores se une la amenaza de más destrucción de empleo, en un sector que ha perdido el 60% de sus alumnos en los últimos años y acumula cierres de empresas.

Críticas a los cursos intensivos

De ahí que en los últimos años se hayan observado todo tipo de iniciativas para mantener el negocio a flote, algunas de dudosa eficacia. Es el caso de los denominados cursos intensivos, una fórmula de enseñanza cuestionada por alumnos y por los propios profesores, pero presente en no pocas autoescuelas de la comunidad aragonesa.


El funcionamiento es sencillo, un alumno se vuelca en el estudio del material teórico durante unas pocas jornadas, pero intensas, hasta ocho horas al día, con la finalidad de superar el examen lo antes posible. Una práctica que para muchos no fomenta la verdadera enseñanza y que incluso suele acabar en suspenso.


Para Bricio, “no es una buena forma de aprendizaje” y “no mejora la seguridad vial”, y critica que incluso con estos sistemas se llegue a aprobar, lo que “demuestra el bajo nivel exigido”. A su juicio, en los últimos años “se han mejorado todos los factores de prevención menos el más importante, el humano”.