Tejerina no aclara cuánto dinero pondrá el Ministerio para actuar contra el lindano

La ministra de Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, eludió ayer en Zaragoza asumir un compromiso claro de financiación y plazos para resolver el grave problema de contaminación por lindano de las instalaciones de Inquinosa (Sabiñánigo) y de toda la cuenca del río Gállego. Tras su primera participación en la Comisión de Seguimiento del Pacto del Agua, solo concretó que el ministerio licitará antes de fin de año las obras para los abastecimientos alternativos a las localidades afectadas -en Santa Eulalia de Gállego y Casas de Esper (Ardisa) siguen sin poder beber del grifo-.

Este trámite llegará, según dijo, antes de que se cierren los términos del convenio que está previsto firmar con la DGA para una actuación integral que deberá incluir también la descontaminación de los vertederos y la fábrica de la empresa química que generó los peligrosos residuos, así como la limpieza del Gállego. A este respecto, Tejerina se limitó a informar de que antes de fin de año dispondrá de un análisis "más detallado" de la situación y a partir de ahí se distribuirán los trabajos entre las tres partes implicadas (el propio Ministerio, la Confederación Hidrográfica del Ebro -que depende de él- y el Gobierno de Aragón).

Garantizó que tanto la Administración central como la autonómica "afrontarán el problema" y recordó que el Estado se encarga de la gestión del dominio público hidráulico (el río), mientras que la Comunidad tiene las competencias en materia de residuos y abastecimientos y los municipios deben ocuparse de la potabilidad del agua de sus redes. "Nos vamos a repartir la tarea y coordinadamente veremos quién se ocupa de cada tema y en qué plazos", afirmó, al tiempo que advirtió de que estas actuaciones "no se pueden acometer de hoy para mañana". Tampoco quiso pronunciarse sobre si contarán para ejecutarlas con los fondos de la Confederación procedentes de la energía reservada de los saltos hidroeléctricos. "Sería adelantar acontecimientos", afirmó.

Algo más concretó Isabel García Tejerina a la hora de hablar de las infraestructuras hidráulicas. Informó a la Comisión de Seguimiento de que las alternativas que se barajaban para desbloquear la construcción de la nueva presa de Santolea "son inviables", pero ya se está trabajando en los estudios para "una mejor ubicación". No obstante, aclaró que "los regantes no se verán afectados por el incremento presupuestario que pudiera conllevar" esta solución.

En cuanto a Mularroya, adelantó que se espera que en diciembre esté aprobada la Declaración de Impacto Ambiental que permitirá retomar en el primer trimestre de 2015 las obras de recrecimiento, paralizadas en marzo de 2013 tras la sentencia del Tribunal Supremo que anuló el estudio ambiental del proyecto original.

Por otra parte, insistió en que los últimos deslizamientos en la ladera de Yesa, tras el inicio de los trabajos de la nueva presa, "nada tienen que ver con los anteriores", si bien admitió la necesidad de "redoblar la vigilancia".

Críticas de la oposición

Tejerina recordó el "compromiso absoluto" de su Ministerio con el impulso de las obras del Pacto del Agua, que se refleja, destacó, en los Presupuestos Generales, con 90 millones para 2015, una cantidad similar a la de este ejercicio. Resaltó que 100 de las 146 actuaciones proyectadas ya están terminadas, licitadas o en tramitación, y que 12 de los 26 embalses que se están construyendo en España se encuentran en Aragón.

Tras la reunión, los partidos de la oposición coincidieron en criticar que la ministra se presentara en Zaragoza sin planes concretos contra el lindano. El portavoz del PSOE, Javier Sada, mostró su preocupación por este "nulo compromiso", mientras que José Luis Soro (CHA) habló de "falta de respeto" de Tejerina por acudir "con los bolsillos vacíos". Miguel Aso (IU) reclamó destinar a la limpieza el dinero consignado para el embalse de Biscarrués. Por su parte, los grupos del PP y el PAR exigieron que las partidas para la descontaminación no corran por cuenta de Aragón.