Más de 600 menores extranjeros solos han llegado desde el año 2000 a Aragón

Desde el año 2000, más de 600 menores extranjeros no acompañados han llegado a Aragón, de los que la mitad han sido tutelados por la Comunidad Autónoma, según las estadísticas oficiales y las estimaciones de expertos que ha recopilado el investigador, educador de menores y profesor universitario Chabier Gimeno Monterde. La llegada de menores extranjeros solos vivió su ‘boom’ entre 2006 y 2008, y ha disminuido considerablemente desde 2009. 

Entre 2000 y 2010, el Gobierno de Aragón tuteló a 298 menores extranjeros que habían venido solos, y entre 2011 y 2013 a 34, según la información facilitada por el Instituto de Servicios Sociales de Aragón (IASS) a través del Servicio de Información de Menores de Aragón (SIMA). El Gobierno de Aragón les ofrece residencia y estudios hasta la mayoría de edad (y, en algunos casos, apoyo hasta los 21).

Gimeno y otros expertos que el autor ha consultado para sus investigaciones sostienen que estas cifras oficiales solo representan la mitad de los menores extranjeros que realmente han pasado por Aragón. En las estadísticas oficiales no figuran los chavales que en los primeros años llegaban a los centros de acogida y se fugaban a los pocos días, antes de que se les abriera un expediente de tutela firme; ni los que no han sido detectados por los servicios sociales o la policía y han permanecido ocultos para el sistema (tanto por la voluntad del menor como obligados por redes de explotación).

Gimeno ha analizado todos los expedientes de menores solos tutelados por la Administración aragonesa entre el 1 de enero de 2000 y el 31 de diciembre de 2013, y ha entrevistado a más de cien chicos. Ha escrito una tesis doctoral sobre los menores extranjeros no acompañados en Aragón y ahora acaba de publicar un ensayo: “Buscavidas. La globalización de las migraciones juveniles” (Prensas de la Universidad de Zaragoza). El autor ha trabajado como educador de menores en Aragón y profesor de Trabajo Social en la Universidad de Zaragoza. Ahora imparte docencia en la Universidad de Valladolid. El próximo jueves 30 de octubre participa en una charla sobre el libro en la librería y centro social La pantera rossa.Perfil: magrebí de entre 15 y 17 años

El perfil medio del menor extranjero acogido en Aragón es un adolescente de entre 15 y 17 años, procedente del Magreb (sobre todo de Marruecos) o del África subsahariana. Menos del 5% son niñas. Permanecen una media de un año y medio bajo tutela del Gobierno de Aragón, mientras reciben formación.

"Es imposible encajar a todos bajo un estereotipo. Los menores son de perfiles muy diversos, dependiendo de dónde vienen y de las motivaciones de su viaje. Unos se han adaptado más o menos bien al sistema y a las normas, y en otros casos la acogida ha sido un fracaso", advierte este educador.

Siguiendo la legislación internacional y española, los menores extranjeros no acompañados debe ser acogidos por la Administración. Unos llegaron en cayuco a Canarias, otros en patera a Andalucía o escondidos en un camión. En algunos casos son detectados por la Policía o los servicios sociales y en otros son ellos mismos los que acuden pidiendo ayuda. También son derivados por otras comunidades autónomas. En 2006 y 2007, el momento álgido de la llegada de extranjeros a España, el gobierno canario envió a 31 menores desde sus centros, previo acuerdo con el Gobierno de Aragón.

El Gobierno de Aragón los aloja en una residencia o piso tutelado; les facilita formación (en institutos o centros sociolaborales), y regulariza su situación. "Los centros de protección para la infancia no estaban preparados para este tipo de chavales. En algunos casos la convivencia ha sido difícil y se han producido tensiones", señala Gimeno. A partir de los 18 años, los chavales pueden seguir el Programa de Emancipación Personal, pero en realidad solo unos pocos acceden a él y muchos quedan desprotegidos a partir de la mayoría de edad.2006 y 2007, los años del 'boom'

Gimeno explica que este flujo migratorio ha pasado por tres etapas: una primera con un goteo de expedientes; otra entre 2006 y 2008, con un incremento notable de menores acogidos, y desde 2009 hasta hoy, donde el número de menores desciende, y los orígenes de estos se diversifican.

"La fase inicial del ciclo, a partir de 2000, se caracterizó por un goteo en la apertura de expedientes y a una acogida precarizada. Muchos menores ocultaban su identidad o su documentación. Entre 2006 y 2008, la Administración aragonesa simplificó su protocolo de acogida. Aumentó el número de menores acogidos y en muchos casos derivados de otras comunidades autónomas", resume.

"Desde 2009 hasta hoy se ha producido una diversificación de los orígenes y un descenso en el volumen de menores solos acogidos en Aragón, al igual que en casi toda España. Ha disminuido el número de menores marroquíes (al principio eran el 75%) y se ha incrementado el porcentaje de menores solos de origen subsahariano, con mayor diversidad de nacionalidades y frecuentes conflictos en torno a la veracidad de las edades de sus pasaportes", afirma.¿Y ahora?

Los menores extranjeros solos siguen llegando, pero en menor número. Ha cambiado su procedencia y también sus proyectos migratorios. En los últimos tres años, 67 menores han sido acogidos por el Gobierno de Aragón (33 con expedientes "de previas" y 34 con tutela firme). En 2013, se abrieron 13 expedientes nuevos, frente a 66 en 2007, el año con mayor afluencia de menores extranjeros en la comunidad.

"Siguen llegando menores extranjeros no acompañados, pero ahora muchos pretenden pasar desapercibidos, evitando acceder a los sistemas de protección. Y en todo caso buscan en Aragón una estancia temporal para continuar su ruta hacia otros destinos, que bien pueden ser otras comunidades autónomas u otros países europeos", explica Gimeno.