Diez senderos para disfrutar caminando por Aragón

Algunos de los mejores paisajes y entornos de la Comunidad solo se pueden descubrir caminando.

Paisaje en la ruta hacia Ordiso
Diez senderos para disfrutar caminando por Aragón
m.f.

Los espacios naturales de Aragón combinan todo tipo de paisajes y formas. Desde la inigualable riqueza natural de los Pirineos hasta las serranías turolenses pasando por la depresión del Ebro, los Monegros y los humedales. Paraísos naturales que ofrecen senderos para aquellos que sepan apreciarlos.Ordiso


Junto al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido se encuentra uno de los valles más bellos de todo el Pirineo, el valle de Bujaruelo. El mismo en el que se inicia la ruta de la travesía de Ordiso. Se trata de una excursión de dificultad media y con una duración variable en función del punto de destino pero que combina amplios valles, cascadas, y excelentes paisajes naturales. El refugio de Ordiso es uno de los puntos de referencia en el camino. 

Pasarelas de Alquézar


Junto a uno de los pueblos medievales mejor conservados de Aragón se encuentra la Ruta de las Pasarelas. Se trata de un entramado de andamios que circula por el último tramo del río Vero. La claridad de sus aguas y las formas de la roca al paso del río han dado como resultado una agradable excursión de una hora y media de recorrido sin mucha dificultad. 

Aguas tuertas


El valle de Hecho, en el Parque Natural de los Valles Occidentales, cuenta con uno de los parajes más singulares de todo el Pirineo. Se trata de Aguas Tuertas, un enclave al que se accede a través de una ruta de media dificultad y en la que el río Aragón ha creado una serie de meandros rodeados de verdes praderas y formaciones rocosas. Tras los dos kilómetros del circuito del valle se puede acceder al ibón de Estanés, uno de los más importantes del Pirineo Occidental. 

Monasterio de Piedra


Aunque la visita al Monasterio de Piedra no puede considerarse como una ruta senderista, es uno de los espacios naturales más interesantes de la provincia de Zaragoza. El espacio cuenta con decenas de cascadas y grutas que las aguas del río Piedra han ido formando con el paso del tiempo y que están totalmente adaptadas a las visitas. Fuera del entorno del Monasterio existen senderos en los que se pueden contemplar los bosques de ribera que rodean el Monasterio. Los llanos de Lalarry


El entorno del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido esta formado por varios valles recorridos por decenas de senderos. Muy aconsejable es la ruta que va desde el valle de Pineta a los llanos de Lalarri. Antes de llegar al espectacular prado se pueden contemplar picos como el collado de Añisclo o el macizo de las Tres Sorores. Una excursión de dificultad media que tiene su colofón en las cascadas del barranco de Lalarri. Pero Ordesa esconde otros extraordinarios caminos como el que lleva al Cañón de Añisclo o las Gargantas de Escuaín. 

El Moncayo

El Parque Natural del Moncayo cuenta con rutas y sendas para todos los públicos. Una de las más habituales surge en el Santuario de la Virgen del Moncayo al que se puede acceder en coche tras pasar la localidad de San Martín de la Virgen del Moncayo. La senda, muy frecuentada, está perfectamente indicada y es de escasa dificultad. Discurre por un espeso bosque que concluye en un prado, desde el que se aprecian unas vistas fascinantes de la meseta aragonesa.  A partir de la Hoya de San Miguel aumenta la dificultad que se concentra en el Collado de las Piedras. Tras ella, la cumbre del Moncayo a más de 2.000 metros de altitud.

Pinares de Rodeno


En el Paisaje Protegido de los Pinares de Rodeno, en la sierra de Albarracín, se hallan cinco rutas senderistas dominadas por un paisaje de bosques de pinos resineros y singulares formaciones rocosas de areniscas rojas. El viento y el agua han llevado a cabo está erosión que deja un paisaje de lo más peculiar, junto a las abundantes pinturas y los yacimientos prehistóricos. En otoño es una de los lugares más bellos de la provincia de Teruel.

La cola de caballo


La ruta de la cola de caballo, en el corazón de Ordesa y Monte Perdido, esa una de las excursiones más populares en el Pirineo. Tiene una duración aproximada de unas tres horas pero los senderos por los que discurre son amplios y no entrañan mayor dificultad. La senda comienza en el aparcamiento de la pradera dejando a la derecha el río Arazas. Cuenta con un desnivel de 480 metros por lo que el paisaje varía a medida que vamos avanzando. La excursión finaliza en el circo glaciar en el que se encuentra la Cola de Caballo. Otra de las rutas más utilizadas para llegar hasta la cascada es la conocida como Senda de los Cazadores que circula por la parte superior de una de las laderas.

Río Pitarque


La del nacimiento del río Pitarque es una sencilla pero agradable ruta de dos horas y media en la comarca turolense del Maestrazgo. No tiene apenas dificultad y une el casco urbano de la localidad de Pitarque con el nacimiento del río que lleva su mismo nombre. Se trata de un bello recorrido paralelo al río en el que se pueden apreciar diferentes paisajes y en algunos claros incluso los macizos de Peñarrubia. En el camino el visitante  también se encuentra con la antigua central hidroeléctrica de Pitarque.

Camino Natural del Ebro


No podía faltar el gran río que vertebra Aragón y una de las Grandes Rutas de la Comunidad. En territorio aragonés el recorrido se compone de 8 etapas que discurren paralelas al camino del Ebro aunque su longitud es mucho mayor ya que abarca desde el nacimiento a la desembocadura del río.