Los zaragozanos aprovechan el buen tiempo e inundan las calles del centro de la ciudad

Los más pequeños disfrutaron de actividades y espectáculos pensados para ellos en el Parque del Agua o la plaza de San Bruno. Torre Ramona se llenó de miles de peñistas y sus enormes guisos.

Los zaragozanos aprovechan el buen tiempo e inundan las calles del centro de la ciudad
Los zaragozanos aprovechan el buen tiempo e inundan las calles del centro de la ciudad

Los zaragozanos inundaron ayer las calles del centro y el Casco Histórico de la ciudad para celebrar un día de Aragón que estuvo marcado por un tiempo casi veraniego. Desde el mediodía, el paseo de la Independencia (con decenas de puestos de venta de libros) o la calle de Alfonso I(llena de magos, payasos, músicos...) acogieron semejante cantidad de gente que a ratos hasta se hacía complicado andar. Pero como es habitual, la fiesta no se restringió solo al Casco, ya que el día de San Jorge contó con otros dos núcleos de celebración más: el Parque del Agua (donde se concentró la chavalería para disfrutar de títeres de cachiporra, paseos en poni...) y Torre Ramona, con miles de peñistas que se reunieron a almorzar, bailar y pasar un buen rato con familiares y amigos.


La jornada comenzó a las 9.00 en la plaza de Aragón con la ya tradicional confección de la bandera floral de la Comunidad. La Asociación de Floristas se encargó de ello y posteriormente acudieron hasta ahí el director general de Comercio, Juan Carlos Trillo, y el Justicia, Fernando García Vicente.


Pero el interés se trasladó rápidamente al Parque Luis Buñuel, en concreto a la plaza de Fluvi y los alrededores del canal de aguas bravas. Los más pequeños disfrutaron de más de una decena de actividades pensadas especialmente para ellos;pero los padres también pudieron hacer un descanso tomándose un chocolate con churros cortesía del restaurante Bocados (en total, repartieron mil tazas).


Por ahí se encontraban Ana Larraga y Eduardo García con su hijo Juan, de dos años, que estaba dando buena cuenta de unos churros que eran muy grandes y que, de hecho, casi no le cabían en la boca. "El día de San Jorge nos solemos ir al pueblo de romería, pero este año no se ha dado la circunstancia. Cuando nos quedamos aquí, salimos y aprovechamos para ver cosas. Además, hoy hace un día muy bueno y esto de dar un chocolate así es una buena idea", comentaban. Por su parte, Andrés Cardiel, Susana Crespo y sus hijas, que suelen pasear mucho por la zona, descansaban en la terraza del bar y pensaban a qué actividades acudir. "No nos vamos a perder el 'break-dance', que a nuestra hija mayor le encanta", reían.

Títeres de cachiporra


A las 11.00, y en la misma ubicación, comenzó el primer pase de los títeres de cachiporra del teatro Arbolé, con un dragón aragonés como protagonista. "Bueno, yo no soy de aquí, soy de Juslibol", dijo mientras intentaba comerse a la princesa entre las risas de los niños. Justo al lado, había una larga fila para darse una vuelta en poni. También hubo yincanas, pruebas de patinaje... Y tampoco faltó el agua ?la temperatura rondaba los 25 grados e invitaba a refrescarse? y se ofrecieron paseos en kayak, hubo demostraciones de 'windsurf' y 'paddle surf', etcétera.


Pero los padres que optaron por el Casco también encontraron varios actos con los que sus hijos se lo pasaron en grande. A las 11.30, en la plaza de San Bruno (justo detrás de La Seo), comenzó el espectáculo 'Jorge y la máquina del tiempo', cuyos artistas, antes de poner el artefacto en marcha y que apareciera hasta un barco pirata, consiguieron que el público no parara de bailar. Ahí estaba Antonio Carrasco, con sus dos hijos y sus tres nietos, y con uno de ellos, Mario ?a punto de cumplir tres años? a corderetas. "Para los críos esto es entretenidísimo», comentaba al tiempo que consideraba "quizá algo escaso» el programa de actos de este año.


Lejos quedan aquellos años previos a la crisis, como cuando en 2007 un centenar de actores de la Fura dels Baus hicieron una espectacular coreografía aérea por el paseo de la Independencia. Aun así, ayer había mucho que celebrar:"San Jorge es el patrón de la Comunidad y no tenemos que olvidarlo», comentaba Carrasco, que luego iba a preparar junto con su mujer un asado para toda la familia:"Les encanta y lo solemos hacer cuando vienen». Mientras, el espectáculo continuaba en la plaza de San Bruno.


Poco después, los grupos En Rolde y La Joven Pachanga de la escuela municipal de música y danza de Zaragoza, además de los Gaiteros del Rabal, tocaron música tradicional aragonesa en la plaza de San Felipe e invitaron a todo el mundo a bailar y sumarse a la fiesta. Y a las 13.00 llegó el turno del concierto de Wind Orchestra Zaragoza en la plaza del Pilar en el escenario instalado junto a la Delegación del Gobierno, donde también hubo jotas y se celebraron otros espectáculos por la tarde.

Cocinar para 120 personas


Pero ya avanzada la mañana, y mientras los zaragozanos tapeaban por el centro, miles de peñistas inundaban el parque Torre Ramona y el olor a paella y pollo corría de un lugar a otro. Domingo González y Mariano Torre, cocinero y uno de los pinches de la peña El Bullizio (del barrio de La Jota), llevaban desde las 8.30 preparando el caldo de la paella y a eso de las 14.00 ya estaban preparados para servir unas 120 raciones. "Hemos usado 12 kilos de arroz, cinco de almejas y otros cinco de mejillones, pimientos...», explicaba González.


"Ha salido un día espectacular», comentaban por su parte Rafa, Andrés e Isabel, de la peña Vaquillera de Las Delicias. Por otro lado, Elena López, cocinera y tesorera de la peña Pasarela del Arrabal, preparaba casi 40 kilos de pollo a la cerveza. "¡A ver si cocinas así de bien en casa, que estoy harto de tanto congelado!», le dijo entre risas su marido, Daniel Esteban."No le hagas caso ?respondió Elena?, que este es un catalán que lo hemos adoptado en la peña casi por pena. ¡Y que sepas que te has quedado sin asado!», le contestó a carcajada limpia.


Por la tarde, el interés se centró en la plaza del Pilar, donde a las 18.30 empezó el espectáculo 'Reflejos de mi voz'. El cielo se fue nublando e incluso cayó un chaparrón sobre las 20.00, que no impidió que se celebrara el concierto de Tachenko, organizado por Aragón Radio, a partir de las 21.00.