Los hosteleros califican de "muy flojitas" las Jornadas de la Cuchara y el Tenedor

“Muy flojitas”, “peor que mal” o “muy mal” son algunas de las respuestas pronunciadas por los responsables de los establecimientos hosteleros participantes en las III Jornadas de Cuchara y Tenedor al ser preguntados por el funcionamiento de esta edición.

Las fechas, “en vísperas de Semana Santa y final de mes”, el mal tiempo o la falta de turistas son algunas de las explicaciones a las que apuntan los hosteleros como causantes de estas Jornadas “tan flojas”, en las que se han vendido 21.000 tapas, 2.000 menos que en la edición anterior según las primeras estimaciones de la Agrupación Soriana de Hostelería y Turismo (Asohtur).

Y es que las comparaciones son odiosas con lo ocurrido el año pasado, «cuando las Jornadas funcionaron bastante bien” y esta vez no se han cumplido las expectativas esperadas por los 37 establecimientos participantes (tres en la provincia y 34 en la capital).

“Yo no habré vendido más de 500 tapas, además he regalado muchas, casi las mismas que he vendido”, indica Santiago Nafría, dueño del bar restaurante Ventorro. “Y claro, a mí no me merece la pena participar, porque tengo que tener a una persona en la cocina exclusivamente haciendo tapas para que luego no me sea rentable económicamente”, apunta.

Los hosteleros apenas han notado la presencia de turistas en las calles de la capital y eso ha repercutido en las ventas. Las tapas servidas han sido para clientes habituales de los bares y restaurantes que, “en vez de pedirse algo para picar, pedían una tapa”, explica Nafría. “Pero vamos, que nada que ver con las Jornadas MIcológicas; aquí entre semana no ha habido nada de nada”, añade.

Inevitablemente, todos los hosteleros acaban acordándose de esta comparación con las Jornadas de la Tapa Micológica. “Todavía no conseguimos sacar a los sorianos de casa para probar las tapas de Cuchara, aunque es verdad que dentro de esta situación tan imprevisible, estas jornadas nos han ayudado a hacer caja”, indica David Ramos, gerente de La Cepa, que insiste en que los esfuerzos, en su opinión, deberían encaminarse a la promoción de estas Jornadas.

“Hay que hacer algo más para atraer a la gente porque estas jornadas no acaban de tener filón. De cara a próximas ediciones, porque imagino que se seguirán haciendo, habría que revisar el formato, porque a la gente no le apetece mucho una tapa de alubias con careta a las 11 de la noche”, comenta Ramos.

Pese a todo, el hostelero aboga por apoyar esta iniciativa de Asohtur, porque “aunque ahora mismo no merezca la pena si seguimos todos a una siempre podemos conseguir que esto prospere”.

Un poco mejor han funcionado estas jornadas en el Bar Tauro, que habrá vendido en torno a 1.500 tapas, 500 menos que en la anterior edición y una cifra muy lejana a las más de 5.000 que sirvieron en las Jornadas de la Tapa Micológica. Su sopa de ajo no ha funcionado mal, pero Julio Antón, dueño del establecimiento, coincide con los hosteleros mencionados en que esta edición ha sido “más floja”, como confirman los datos de Asohtur.

“Yo creo que habría que darle un poquito más de bombo, más publicidad. Me consta que este año no ha habido apenas buzoneo y, desde luego, nada tiene que ver la campaña que se hace en las Jornadas Micológicas con esta”, explica Antón, quien sin embargo se muestra dispuesto a seguir trabajando para la causa ya que “no sirve de nada hablar por detrás, hay que decir las cosas en las reuniones en las que nos juntamos todos los hosteleros para que las cosas empiecen a funcionar mejor”.

Valoraciones de Asohtur

Asohtur, entidad organizadora de este evento gastronómico apunta a la climatología como principal responsable de este descenso en las ventas. “La climatología no ha acompañado a pesar de que la Agrupación retrasó a finales del mes de marzo la celebración de las Jornadas con el fin de que las previsiones meteorológicas fueran más favorables y propicias para alternar y tapear”, han indicado a través de un comunicado de prensa.

Entre los datos “reseñables” de esta tercera edición, destacan que un establecimiento ha vendido más de 1.500 tapas y otros siete más de 1.000 cada uno, lo cual supone un promedio general de 600 tapas por local; y que la Agrupación ha detectado “a través de varios sondeos que el público se decanta y opta por tapas de calidad”.

Otra de las notas positivas que se desprenden de esta edición es el incremento del 20% en el número de votos registrados para votar a la mejor tapa de estas Jornadas. Un total de 371 personas han votado, algo más de una tercera parte de ellas, un 37,3%, a través de la aplicación para teléfonos móviles de las Jornadas de la Cuchara y el Tenedor, que ha registrado casi 300 descargas desde Google Play Store, mientras que el resto, un 62,8%, ha dejado su voto a través de la plataforma creada en la web de la agrupación (www.asohtur.com).

Gracias a los votos otorgados por el público, el establecimiento que haya acumulado el mayor número de sufragios levantará el trofeo a la ‘Mejor Tapa Popular de Cuchara y Tenedor’, uno de los galardones previstos en la celebración de estas III Jornadas de la Cuchara y el Tenedor, junto al de ‘Mejor Tapa de Cuchara y Tenedor’, otorgado por un jurado de especialistas que designa en base a una serie de criterios las tres mejores tapas de la cuchara y el tenedor.