Acto de homenaje a la Constitución

Gustavo Alcalde: "El camino del gratis total lleva a la voladura del sistema de bienestar"

El delegado del Gobierno en Aragón ha apostado por el cumplimiento del déficit, la flexibilidad y la reforma fiscal para salir de la situación de crisis.

El delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, ha apostado este miércoles por el cumplimiento del déficit, la flexibilidad y la reforma fiscal como "única senda posible" para salir de la situación de crisis, y ha dejado claro que el camino del "gratis total" lleva a la voladura del sistema de bienestar. 


Así lo ha indicado el delegado del Gobierno en su intervención durante el acto institucional celebrado este miércoles en Zaragoza con motivo del 34º aniversario de la Constitución española y que ha contado con la participación de representantes de otras instituciones de la comunidad.


En su discurso, ha hecho un repaso por la actual situación del país y por las medidas que ha tenido que ir adoptando el gobierno de Mariano Rajoy, "duras, difíciles e impopulares" pero imprescindibles y ha dejado claro que el Gobierno central comprende "que el conjunto de la sociedad lo está pasando mal y que determinados colectivos los están pasando muy mal".


"Nuestra responsabilidad" es que "esos sacrificios que se están demandando a los españoles no caigan en saco roto, que los sacrificios de hoy se transformen en recompensa mañana, que sirvan para sentar unos cimientos sólidos de crecimiento real", ha añadido.


Y ha apostado por una "única senda posible" basada en la consolidación fiscal y en tener una deuda sostenible, en la reforma del sistema financiero y en unas reformas estructurales que aporten flexibilidad y competencia, porque "seguir por el camino del gratis total nos lleva más pronto que tarde a la voladura del sistema de bienestar" que tanto ha costado construir.


Aunque el camino emprendido está siendo "largo, difícil, lleno de tropiezos y sinsabores" es "un camino que debemos recorrer" y "si lo hacemos todos juntos será mucho más llevadero", ha añadido Alcalde, quien ha añadido no obstante que solos o acompañados lo van a recorrer.


"Espero que más pronto que tarde veremos la salida del túnel" porque "estaremos en un día nuevo, cargado de proyectos, ilusiones y esperanzas, las de 47 millones de españoles", ha dicho.


También ha hecho el delegado del Gobierno una referencia a "la crisis estructural, con agudizaciones coyunturales", que también agobia a España y que es "la crisis institucional que representan los nacionalismos excluyentes y separatistas", lo que en su opinión agrava la primera y dificulta su solución porque "mina más si cabe la credibilidad que proyecta España al exterior".


Alcalde, respecto a la Constitución y a la posibilidad de llevar a cabo su modificación, ha remarcado que hacen falta "esfuerzos comunes" y en ningún caso es suficiente que "un grupo social o los dirigentes de un territorio muestren su disconformidad".


"Lo que unió el conjunto no lo puede fragmentar una parte", ha añadido Alcalde, al tiempo que ha remarcado que "la suma de la nación española es la garante de pervivencia, de su continua búsqueda de valores esenciales, de su sentido como referencia de convivencia".


Porque en la Constitución "no caben interpretaciones de parte, no caben lecturas interesadas, ni cansancios" y "si el modelo se agota lo debemos decir el conjunto de los ciudadanos, no los territorios", ha continuado el delegado en su intervención, que ha comenzado advirtiendo que su discurso no tenía "ningún afán de generar polémica".


Se ha referido a las "leyes obsoletas" o a aquellas "que se demuestran ineficaces para resolver los problemas de los ciudadanos", y ha hecho hincapié en que "no tienen que incumplirse", sino "cambiarse a través de los procedimientos legales dispuestos al efecto". "La garantía que tienen los españoles es saber que las leyes son la mejor forma de expresar sus reivindicaciones", ha apuntado en este sentido.


Por ello, ha rechazado "aquellos mensajes inequívocos que lanzados desde determinados foros pretenden razonar o justificar el incumplimiento de la ley", teniendo en cuenta que "acaban conduciendo a la desobediencia civil y a la insumisión, auténticas termitas de los pilares en que se sustenta nuestra convivencia".