Las matemáticas tienen un papel destacado en el sistema educativo porque se utilizan en casi todas las actividades humanas, fuera de las aulas. Eso sucede en las construcciones (edificios, mobiliario urbano, suelos, cerramientos…), aunque si no estamos acostumbrados a distinguirlas, a veces lo hace de forma no muy clara e incluso escondida. Hoy vamos a dar ejemplos de algunas manifestaciones de las matemáticas en nuestras ciudades y pueblos, sobre todo para avanzar en la posibilidad de ver las matemáticas a nuestro alrededor.

Zaragoza

Nos situamos en el centro de Zaragoza y miramos el edificio de Correos, que fue construido en 1926, en el paseo de la Independencia. Es una muestra de estilo neomudéjar, con una mirada arquitectónica a la forma de construir de siglos pasados en nuestra tierra y que, como tal, utiliza muchos elementos geométricos. A su lado, y un año más tarde, se construyó el edificio de Telefónica, para cuya construcción, en cambio, se inspiraron sus arquitectos en una tendencia de futuro, en la vanguardia europea (de la que fueron destacados exponentes la Bauhaus o Le Corbusier, por citar algunos ejemplos).

Son dos edificios contiguos y con mucha geometría en su fachada, pero utilizada de forma muy diferente, y cuya contemplación nos permite distinguirlos claramente en la impresión que nos producen y en la escuela en que se insertan. En el caso de Correos, se ven diferentes formas de llenar el plano de la pared con un mismo motivo que se repite (como sucede en la construcción mudéjar) y todo está muy adornado: se busca la belleza y la armonía en no dejar un milímetro sin adornar.

En el caso del edificio de Telefónica, por el contrario, su belleza viene de la ausencia de ornamentos, de las líneas puras y bien definidas. Pero eso sí, en los dos casos, como en la mayoría de las construcciones y utensilios que utilizamos, la simetría está presente: cuando pasees por las calles de tu ciudad o pueblo (o cuando vayas de visita a algún otro lugar) saca algún tiempo para observar los edificios y verás que siempre que ha sido posible se hacen simétricos, de tal forma que si hay alguna casa que no lo es se ve como muy extraña.

El edificio de Correos

Si te fijas en la fachada de Correos podrás distinguir muchas formas geométricas: haz una lista, seguro que es larga. Si te acercas a la entrada verás uno de los objetos emblemáticos de Zaragoza, que durante años fue lugar de citas: el león de Correos (imagen a la derecha). ¿Qué forma tiene la placa que lo contiene? En todo este edificio hay muchas rejas: obsérvalas e intenta delimitar el motivo mínimo que se repite para diseñar la reja. Y si te das la vuelta y miras el tejado de la casa del otro lado del paseo, divisarás una antena de teléfono. ¿Puedes describir la forma geométrica en que está construida? ¿Cuál crees que es la razón de que sea así?

Nos hemos fijado solo en dos edificios de Zaragoza, pero estos te pueden servir de inspiración para ir viendo geometría en los que tengas cerca: la forma general del edificio, la de los motivos decorativos, de puertas y ventanas,… Y la simetría presente en todos ellos.

Otra plasmación común y frecuente las matemáticas a nuestro alrededor son los mosaicos. Los hay tan normales como los que podemos ver en nuestras casas, en el suelo o en la pared (lo más habitual es que sean de forma cuadrada, rectangular o en contados casos hexagonal). En los paseos de la Constitución y de Sagasta tenemos una sencilla combinación de octógonos (no regulares) y cuadrados, obtenidos ambos a partir de cuadrados enteros y medios. Y en una de las salas del Palacio de Sástago, algo tan sencillo como efectivo: con ladrillos iguales de distinto color se consigue una sensación de escalera en el espacio.

Volver a la portada de ESCOLAR