Para trabajar en el aula y en casa

La serie televisiva ‘David el Gnomo’ ofrece múltiples y variadas posibilidades para trabajar en clase con nuestros alumnos. Una serie de dibujos animados tan cargada de valores de todo tipo puede ser la excusa perfecta para realizar numerosas actividades relacionadas con los contenidos curriculares de todas las áreas.


En primer lugar, en conocimiento del medio. A lo largo de los capítulos de esta fantástica serie aparecen un gran número de hábitats y ecosistemas diferentes. David, nuestro protagonista, visita a sus amigos recorriendo muchos lugares distintos, así que podemos utilizar esta variedad para inspirarnos y así realizar nuestro propio ‘Blog viajero’. También podemos estudiar los distintos ecosistemas que visita, trabajando las especies que allí habitan y sus diferentes condiciones de vida. Además, podemos centrarnos en la distinción entre animales domésticos y salvajes, y clasificar los que aparecen en la serie en herbívoros, carnívoros,etc.. Para ello, podemos realizar murales donde se aprecie con claridad las distintas clasificaciones de los animales.


Teatro de sombras

Y como actividad o tarea final incluso nos podemos proponer hacer un teatro de sombras, en el que todos los integrantes de la clase realicen movimientos típicos de los animales reflejados en la serie u otros, trabajando de este modo actitudes y expresión corporal, psicomotricidad...


El ámbito de los valores es un campo muy amplio para tratar en esta serie. La resolución de problemas, por ejemplo, es una de las virtudes de nuestro amigo David y al hilo de ello podemos sugerir problemas diarios, típicos de todos los días, y pensar cómo los solucionaría David el Gnomo. Junto a ello, se puede crear un espacio en el aula dedicado exclusivamente a trabajar los problemas cotidianos.


Lengua es otra área a través de la que David el Gnomo puede entrar en nuestra clase. Podríamos sugerir trabajar la estructura de los textos mediante la organización de un pequeño concurso educativo en el que los alumnos tendrían que adelantar las próximas aventuras de David, pensar y escribir qué le va a suceder, cambiar el modo de resolver sus problemas, etcétera.


También se pueden crear ‘audicuentos’, en los que utilizando nuestros propios dibujos tendríamos que crear historias paralelas, semejantes o no a la serie televisiva, y convertirnos en creadores de dibujos animados al poder elaborar también en formato vídeo nuestros propios dibujos, trabajando el lenguaje de los personajes, los escenarios, y la relación entre ellos.


Estos son solo unos ejemplos de lo que ‘David el Gnomo’ nos puede ofrecer para progresar, una serie televisiva muy apta para nuestra escuela y nuestros hogares.

Diego Arroyo es maestro de primaria en el colegio Miguel Artigas, de Pinseque.


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