Los vándalos son menos, pero se notan más

Desgraciadamente en todo el mundo hay sucesos que descontrolan las ciudades cometidos por sujetos que no tienen escrúpulos a lo hora de hacer cualquier cosa con el objetivo de decir ¡Estamos presentes! Guatemala ha ido subiendo su escala particular de violencia generalizada. Las noticias apuntan que ya se está recrudeciendo la violencia por todos los departamentos o dicho de otra manera, por toda la República.

La pena es que los grupos de personas inescrupulosas son pequeños y hay quien hasta los puede señalar, pero las consecuencias de sus actos son tales que llenan a diario las páginas de los periódicos, y no precisamente “la prensa amarillista”, lo cual es una pena.

Después de marchas “pacíficas” que confluyen todas en la Plaza de la Constitución, por mucha presencia policial que haya, que nunca es suficiente, siempre dejan “el sello” de su paso en las aceras, fachadas de los edificios y sobre todo en la inocentes tiendas y comercio que el único pecado que han cometido es estar en el lugar de paso elegido por los dirigentes de turno.

Respecto a los grafitis, se ha intentado orientar a esos artistas callejeros, y utilizo la palabra artista con toda sinceridad… a que lo hagan en áreas específicas para ello. Pero siempre hay algún independiente que quiere dejar su “nota” desafinada y fuera del pentagrama.

En definitiva, que el vandalismo está a flor de piel y no hay visos que vaya a reducirse, al contrario, la violencia va en aumento.