TARAZONA

Primer año y balance positivo de la residencia de Malón

La nota negativa es que no se ha alcanzado la cifra de clientes que sus responsables esperaban.

Ha pasado un año desde que la residencia Luz del Moncayo abriera sus puertas en Malón. Ayer se realizó la inauguración oficial y el acto sirvió para analizar los primeros meses de funcionamiento.

 

El obispo de la diócesis de Tarazona, Demetrio Fernández, ofició una misa en la residencia y después se dirigieron a los presentes el alcalde de Malón, Alberto Mesa, y César Ruiz, director de Servicios Geriátricos del Norte, empresa responsable de Luz del Moncayo.

 

"Es nuestro primer aniversario y el balance es positivo a pesar de que la crisis también ha afectado al sector residencial. Somos la única empresa que ha creado puestos de trabajo en la comarca, y nuestros objetivos de servicio de calidad los estamos cumpliendo", indicó Ruiz.

 

En Luz del Moncayo trabajan 17 personas, todas de la comarca (ocho son del propio Malón) y la mayoría mujeres. "Todos son trabajadores cualificados y formados con titulación. De hecho, impulsamos dos cursillos en un año en el pueblo en los que han participado una treintena de personas", asegura César Ruiz.

 

La nota negativa es que la entrada de residentes no ha ido como los responsables esperaban. Hay 50 plazas, de las cuales están libres la mitad, así como otras diez plazas diurnas.

 

Si por algo se caracteriza esta residencia es por los espacios diáfanos y luminosos con 1.500 metros cuadrados construidos en una planta y otros 2.500 de zonas ajardinadas, juegos y paseos. En total son 28 habitaciones dobles e individuales, además de salón, sala de terapia, de lectura e Internet, comedor, sala de fisioterapia?

 

"Para nosotros es importante el color, para que prime la alegría y el buen trato con el residente, para conseguirlo también programamos actividades grupales constantes, ahora estamos preparando el carnaval", explica el responsable del centro.