MANCOMUNIDAD CENTRAL DE ZARAGOZA

Más de 30 niños buscan plaza en la guardería de Cadrete

Está previsto que en unas semanas se abra el plazo de inscripción para la reforma del centro infantil, en última fase de las obras

Un total de 31 niños esperan a que finalicen las obras de ampliación de la guardería municipal 'Arco Iris' para poder entrar en las aulas. Por el momento, el centro infantil ha arrancado a medio gas, con las instalaciones del año pasado y los niños matriculados en el 2008, que iniciaron el curso el 7 de septiembre.

 

"Cada vez vienen más parejas jóvenes a vivir a las nuevas zonas de urbanización y la demanda de plazas en la guardería ha aumentado mucho, por lo que era necesaria la ampliación", explica la alcaldesa de Cadrete, Mª Ángeles Campillos.

 

El plazo de nueva matriculación se ha retrasado este año a la espera de que terminen las obras, que empezaron a ejecutarse a pleno rendimiento en junio. "No hemos querido abrir el periodo de inscripción hasta que sepamos que la obra está lista. No obstante, ya tenemos 31 familias que han mostrado su interés, y en cuanto estén acabadas las obras, los niños serán los primeros en inaugurar el centro", asegura Campillos.

 

Sus previsiones son que en unas semanas puedan comenzar las matriculaciones, aunque los trabajos no tienen todavía fecha definitiva. "Es una obra muy compleja que se ha hecho en apenas tres meses. Solo falta rematar los últimos detalles, como la rampa que conecta los dos edificios o el recreo de la zona rehabilitada. Esperamos que para después del Pilar ya esté lista", indica la primera edil. En cuanto se abra el plazo, se avisará a las familias interesadas, se emitirá un bando y se colgará el en el centro infantil.

 

Con la reforma, la guardería pasará de ser de una a dos vías, lo que significa duplicar sus aulas y la oferta de plazas. Para la ampliación se ha aprovechado el edificio del colegio antiguo, anexo a la guardería, de forma que puedan conectarse. Algo a lo que se opone la concejal de CHA en el Ayuntamiento de Cadrete, Mª Ángeles Mercader: "No creemos en la habilitación de un edificio obsoleto que hay que adaptar íntegramente, y que además está en zona inundable. Hubiera sido mejor construir un edificio junto al nuevo colegio".

 

Por su parte, la primera edil considera que los gastos de una nueva construcción hubieran sido mucho más elevados que la reforma de la guardería municipal, cuyo coste asciende a 220.000 (sin contar algunas obras anexas).