Un año y medio después de que se adjudicara la construcción del pabellón polideportivo a la UTE Caminos y Construcciones Civiles y Socebro, los trabajos aún no han empezado. El Ayuntamiento ha iniciado un expediente administrativo para rescindir el contrato "por incumplimiento culpable del contratista en el plazo de ejecución". La empresa adjudicataria, por su parte, reclama al Consistorio 450.953 euros más IVA en concepto de lucro cesante (lo que hubiera obtenido por la obra) y por los costes de liquidación.

La UTE argumenta que no estaba contemplada en el proyecto inicial una línea eléctrica de alta tensión que atraviesa la parcela y le impide continuar las obras, pero el Ayuntamiento considera que son "excusas". Las negociaciones que han mantenido en los últimos meses las dos partes para rescindir el contrato de mutuo acuerdo han resultado infructuosas. "Nosotros estamos dispuestos a abonar los gastos justificables, pero en ningún caso a indemnizarla por un trabajo que no ha hecho ni ha tenido nunca voluntad de hacer", afirmó José Antonio Sanmiguel, primer teniente de alcalde y concejal de urbanismo.

Sanmiguel añadió que el Consistorio se reserva el derecho de reclamar a la empresa indemnizaciones. En el proceso abierto ahora para rescindir el contrato, la empresa podrá alegar y, en caso de oposición, será la Comisión Jurídica Asesora del Gobierno la que dictamine quién tiene razón. "Luego queda la vía judicial si no se llega a un acuerdo", manifestó el teniente de alcalde bilbilitano.

La de Caminos y Construcciones Civiles y Socebro fue la única oferta presentada al concurso del polideportivo. En ella se proponía una rebaja importante sobre el presupuesto de licitación. "Mi opinión personal es que, luego, la UTE comprobó que con ese dinero no podía hacer la obra y esperaba conseguir del Ayuntamiento un reformado del proyecto, aumentando considerablemente el presupuesto. Pero como la corporación anterior y esta se han mantenido, no han empezado", expresó el concejal de urbanismo.