Marcado acento aragonés en el XXXI Trofeo Rafael Feliz

El CN Helios se hizo con el título, El Olivar fue segundo y el EWZ, cuarto. La piscina de Bomberos vivió uno de los mejores ambientes de los últimos años.

El waterpolo aragonés fue el gran protagonista de la 31ª edición del Trofeo Rafael Feliz para alevines, que en su versión nacional se lleva desarrollando desde 2002. El CN Helios revalidó su título del año pasado y se llevó la copa por tercera vez a sus vitrinas, El Olivar fue segundo y los organizadores del Escuela Waterpolo Zaragoza (EWZ) quedaron cuartos. Solo el Rubí, tercero rompió la hegemonía de los equipos locales.

El trofeo, que llegó a contar con 32 equipos, pero que tras el cierre del Parque Deportivo Ebro se detuvo durante dos temporadas, volvió a la actividad el año pasado con un formato de 16 participantes que el fin de semana pasado se repitió. El ambiente en la piscina del Parque de Bomberos de Zaragoza fue excelente durante las dos jornadas de partidos y el público no faltó en la grada. No en vano, fue una de las ediciones más multitudinarias de las que se recuerdan.

El EWZ metió en el agua dos conjuntos, al igual que el CNHelios, mientras que El Olivar estuvo presente con uno. De fuera de Aragón llegaron el Askartza y el Leioa del País Vasco; el Morvedre, el Turia y el Castelló, de la Comunidad Valenciana; Moscardó y La Latina de Madrid; el Rubí y el Caldes, de Cataluña; y el Pontevedra de Galicia.

Los 16 conjuntos fueron divididos en cuatro grupos. En ellos, los dos primeros pasaron a las eliminatorias por el título. El Olivar dejó atrás en semifinales al EWZ y elCN Helios, al Rubí. En la final los azulones vencieron 5-3 y en el encuentro por el tercer puesto los catalanes se impusieron a los anfitriones 11-7.

El máximo goleador del torneo fue David de Requesens, del Rubí, y el mejor portero, el heliófilo Víctor Arranz.