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Botellas de ‘oro líquido’ como método de lucha contra la despoblación rural

Eroski se suma la iniciativa Apadrinaunolivo.org para la recuperación de 1.000 olivos en la localidad turolense de Oliete comercializando en sus tiendas 5.000 litros de una edición limitada de aceite.

Las botellas, de cristal y con etiquetas de papel reciclable, se pueden comprar en los establecimientos del grupo a un precio de 8,5 euros.
Las botellas, de cristal y con etiquetas de papel reciclable, se pueden comprar en los establecimientos del grupo a un precio de 8,5 euros.
Eroski.

La despoblación es la principal problemática que afecta a la provincia de Teruel. La falta de habitantes ha mermado la vida de sus municipios, hasta dejar algunos casi desolados, como es el caso de La Estrella, una pedanía colindante a Mosqueruela en la que actualmente viven dos vecinos, y por ende, a sus economías, basadas de manera predominante en el sector primario.

Los cultivos se han abandonado, con la consiguiente carencia de la biodiversidad y del paisaje. En el caso del olivo, la localidad de Oliete es una de las que más está sufriendo esta pérdida. En total, esta población turolense, en la que residen 364 vecinos, tiene unos 100.000 olivos abandonados. Esta cifra tan preocupante fue el detonante que impulsó Apadrinaunolivo.org. Una iniciativa que lleva a cabo un modelo sostenible de desarrollo rural con inserción social. Su principal objetivo es la recuperación de los cultivos de los olivares y del olivo en el territorio aragonés. Así, desde su puesta en marcha hace cinco años, se han conseguido recuperar 7.300 olivos gracias a la colaboración de los padrinos y las madrinas, que van desde particulares hasta empresas, entre las que se encuentra Eroski.

Dentro de este proyecto que la cooperativa desarrolla en Aragón, se compromete a recuperar 1.000 olivos centenarios abandonados en Oliete mediante la comercialización en sus tiendas de 5.000 litros de una edición limitada de aceite de oliva virgen extra y se convierte en la primera cadena de distribución en adquirir este compromiso. "Estamos muy agradecidos de esta colaboración con Eroski. La acción es una oportunidad increíble para lograr concienciar a la sociedad sobre la problemática que afrontan nuestras áreas rurales y, además, ir un paso más allá haciéndoles participes de la solución mediante la compra de un producto de alta calidad y con un fuerte propósito", afirma José Alfredo Martín, cofundador de la asociación Apadrinaunolivo.org.

La acción, además del impacto positivo en la biodiversidad de los olivares de alto valor natural, genera bienestar y empleo digno en los agricultores locales, creando una economía rural sostenible en Oliete que garantiza su supervivencia en el tiempo. Esta iniciativa se enmarca dentro del modelo de Eroski basado en impulsar un tejido productivo agroalimentario local altamente diversificado como elemento clave para la sostenibilidad del sector y su contribución a la economía, la cultura y el paisaje del entorno cercano a cada una de sus tiendas.

"La acogida está siendo excelente, en los dos meses que lleva en marcha la iniciativa se han vendido ya unas 500 botellas. Nuestros clientes están muy concienciados sobre esta problemática medioambiental y social del abandono de las áreas rurales y juntos trabajaremos por lograr reducir la huella de carbono mediante la recuperación y puesta en valor del olivar", explica la directora de Eroski en Aragón, Pilar Cristóbal.

Estos primeros datos de ventas son alentadores para el proyecto, en el que además de apoyar a la zona rural se realiza un impulso en la lucha contra el cambio climático. Para conseguir el objetivo y lograr vender las 5.000 botellas previstas se han cuidado todos los detalles.

En cuanto a la calidad del producto, es un aceite de oliva virgen extra de categoría superior obtenido directamente de aceitunas y solo mediante procedimientos mecánicos.

El precio de cada botella es de 8,5 euros. Además, la materia prima es la base pero también se han tenido en cuenta otros factores, como su envase. Se trata de una botella de vidrio de un litro fabricada por Vidrala y Torrent –quienes ceden los envases y tapones metálicos de rosca respectivamente– con una etiqueta ecológica de papel con fuentes responsables que no está pegado a la botella, lo que permite reciclar el papel una vez consumido el aceite. Asimismo, el papel de la etiqueta absorbe el aceite que se puede derramar al servirlo, lo que evita que el envase este aceitoso y resbaladizo.

Visita al proyecto

Eroski ha organizado una visita al olivar de Oliete para que sus clientes puedan conocer cómo se hace el aceite y descubrir el proyecto que hay detrás del producto. Durante el mes de mayo, se realizó la primera visita a este terreno en la que se congregaron 50 socios cliente de la cadena de distribución. Estos visitaron las plantaciones y realizaron una cata de tres tipos de aceite.

El objetivo de la cooperativa es organizar más visitas a este cultivo, que ya se ha bautizado como ‘El Olivar Eroski’, para así conseguir animar a sus clientes a conocer este proyecto en Oliete, incluso ir un paso más allá vinculándose como padrino o madrina del proyecto.

Con esta iniciativa los visitantes pudieron descubrir todo el proceso de creación de este alimento que se consume en los hogares a diario.

Una iniciativa que, además de mostrar qué hay detrás de la botella de aceite que se encuentra en el estante del supermercado, permite visibilizar la vida de un pueblo pequeño, que ha sufrido de primera mano la despoblación. Una jornada amena y diferente que además se encuadra dentro de uno de los objetivos de Responsabilidad Social Corporativa del grupo, impulsar un tejido productivo agroalimentario local que es clave para la sostenibilidad del sector y contribuye a la economía, cultura y paisaje del entorno.